Durante la sesión de este jueves en el Concejo Deliberante de la capital, la presencia de choferes de la aplicación UBER generó un cuarto intermedio para permitir que expusieran su postura en relación a la ordenanza que los obliga a registrarse ante el municipio.



En representación del grupo, uno de los conductores tomó la palabra y expresó el malestar del sector frente a la normativa aprobada por el cuerpo deliberativo. "Esta ordenanza busca regularizarnos, pero sentimos que se nos persigue y se nos amedrenta. Somos personas de diferentes edades, con muchas dificultades para conseguir empleo, y encontramos en UBER una salida para subsistir y llevar un plato de comida a nuestras familias", manifestó.
El vocero solicitó formalmente al Concejo una prórroga de entre 60 y 90 días para poder adecuarse a las exigencias de la ordenanza, así como también pidieron dejar sin efecto la nota elevada al intendente que habilita el secuestro de vehículos no registrados. "Es nuestra herramienta de trabajo y sin ella no podemos sostener a nuestras familias. Las multas son altísimas e imposibles de afrontar para quienes vivimos de esta actividad", señalaron.



Tras la intervención, el Concejo retomó la sesión ordinaria, mientras se evaluará el tratamiento de las demandas presentadas por el sector de choferes de aplicaciones de transporte.