Tras notificar al Juzgado Federal de La Rioja, se implementó un protocolo de seguridad en colaboración con especialistas de Patrimonio Cultural.
Tras ser notificados, los uniformados se dirigieron al lugar y, en coordinación con el Juzgado Federal de La Rioja, se contactó a especialistas de Patrimonio Cultural de la provincia con quienes se implementó un protocolo de seguridad perimetral para preservar el sitio del descubrimiento.
Con la llegada de técnicos especializados, se llevaron a cabo tareas de campo y el levantamiento de los restos óseos. Estos serán sometidos a estudios detallados para obtener información valiosa sobre la historia y la cultura de la región. La preservación de las piezas arqueológicas es una prioridad en este proceso, asegurando su cuidado y conservación para las generaciones futuras.
Este hallazgo arqueológico representa un importante aporte al conocimiento de la historia local, destacando la colaboración entre autoridades locales, fuerzas de seguridad y expertos en preservación del patrimonio cultural. La comunidad espera con interés los resultados de los estudios que revelarán detalles fascinantes sobre la vida en la región hace más de ocho siglos.