Un resultado que, si bien no los posicionó en los escalones más altos del podio, deja entrever una actuación marcada por la "garra riojana" y un espíritu combativo inquebrantable frente a rivales de fuste.
El camino de los riojanos en el torneo estuvo plagado de desafíos. Desde el inicio, se enfrentaron a selecciones con mayor rodaje y preparación, equipos que a menudo cuentan con una infraestructura y ritmo de competencia superiores. Sin embargo, esto no amedrentó al combinado provincial, que en cada partido dejó el alma en la cancha, demostrando el compromiso y la pasión que caracterizan al hockey de la provincia.
El cierre de su participación tuvo un sabor agridulce. En el partido por el séptimo puesto, La Rioja protagonizó un vibrante encuentro ante su par de Catamarca, que finalizó con un emocionante empate 3 a 3. Los goles riojanos, que hicieron vibrar a la delegación y a los seguidores, llegaron de la mano de Gonzalo Pereyra, Lucas Pereyra y Gabriel Molina, quienes con sus anotaciones reflejaron la capacidad ofensiva del equipo. Lamentablemente, la definición desde el punto de penal no les fue favorable, y terminaron cayendo por 4 a 3 en una tanda que mantuvo a todos en vilo.
Más allá del resultado final, la experiencia en Rosario es invaluable para el desarrollo del hockey riojano. Enfrentarse a los mejores exponentes del país permite medir el nivel, identificar áreas de mejora y, sobre todo, fortalecer el carácter y la unión del grupo. La "garra riojana" no es solo una expresión, sino un reflejo del esfuerzo y la dedicación que estos deportistas ponen en cada entrenamiento y en cada partido, un claro mensaje de que, a pesar de las adversidades, siempre están dispuestos a dar batalla.
Esta participación en el Argentino de Mayores reafirma el compromiso de la provincia con el hockey y sienta las bases para futuras competiciones, esperando que con mayor ritmo de competencia y preparación, los resultados sigan acompañando el enorme espíritu deportivo de La Rioja.