Marcelo Gallardo puso manos a las obras en River Plate y ya se encuentra trabajando en una fuerte depuración del plantel de cara a un 2025 en el que espera que el estilo de juego de su equipo se asemeje a aquel que lo llevó a ganar tantas cosas importantes.
Es claro que el Muñeco cuentan con varios futbolistas que viven lesionados, que están en bajo nivel o que rinden a medias pero no son del estilo que a él le gusta, con juego pero también con sacrificio por el bien común.
Gallardo ya habló con Jorge Brito y le comunicó que no tendrá en cuenta o pelearán muy detrás si se quedan los defensores Federico Gattoni, Agustín Sant'Anna y Ramiro Funes Mori, mientras que tanto Milton Casco, Paulo Díaz y Enzo Díaz tienen las puertas también se llega algún ofrecimiento que convenga a todas las partes.
En el mediocampo Nicolás Fonseca, Matías Kranevitter, Nacho Fernández y Manuel Lanzini, jugaron poco y nada en este último tiempo y deberán buscarse nuevo club a partir del año que viene. A todo esto hay que tener en cuenta que también Claudio Diablito Echeverri dejará la institución de Núñez para sumarse al Manchester City de Pep Guardiola y que Gonzalo Pity Martínez acaba su vínculo el 30 de diciembre, pero aún tiene esperanzas de renoverlo.
Y en la delantera se vienen casos particulares ya que Pablo Solari declaró que si bien está teniendo continuidad de titular quiere pensar en frío su futuro y luego está lo que suceda con el golador de Miguel Borja, que bajó muchísimo su nivel y también su cláusula y los dirigentes del Millo creen que es el momento justo para negociarlo, más teniendo en cuenta que no es del todo del gusto de Gallardo.
Es que casi seguro tiene un pie y medio fuera del Monumental es Adam Bareiro, quien no hace goles ni está cerca de las performances que lo llevaron a fijarse en él. También saldrá casi con seguridad Agustín Ruberto, el juvenil que quiere sí o sí Defensa y Justicia.