La Asociación Civil Protectora de Animales Huellas Callejeras – Chamical denunció penalmente un hecho de crueldad animal ocurrido el pasado domingo 14 de julio durante una carrera de caballos realizada en el predio conocido como El Quebrachal, ubicado en el departamento Chamical. Según lo informado por la organización, una yegua llamada India Bruja perdió la vida como consecuencia del brutal trato recibido durante la competencia.
La denuncia fue radicada el 15 de julio ante el Ministerio Público Fiscal de la Tercera Circunscripción Judicial de La Rioja, en el marco de la Ley Nacional N.º 14.346 de Protección Animal, que penaliza los actos de maltrato y crueldad hacia los animales.
Piden la suspensión de las carreras
A través de un comunicado oficial, Huellas Callejeras solicitó la adopción de medidas urgentes para suspender este tipo de eventos hípicos en todo el departamento Chamical, al menos hasta que se garantice el cumplimiento de normas básicas de protección animal y la presencia obligatoria de profesionales veterinarios.
“El caso de India Bruja no puede quedar impune. No es un hecho aislado, sino parte de una práctica sistemática donde los animales son explotados sin controles ni asistencia médica”, expresaron desde la entidad.
Una práctica en el centro del debate
Las carreras cuadreras son una tradición arraigada en varias localidades del interior riojano, especialmente en Chamical. Sin embargo, desde distintas organizaciones animalistas vienen advirtiendo sobre la falta de regulación, el uso indebido de fármacos, el esfuerzo físico extremo y la ausencia de protocolos de emergencia para los animales.
“El sufrimiento de los caballos es evitable si se aplican normas adecuadas. Las carreras sin controles son escenarios propicios para el maltrato”, agregaron desde Huellas Callejeras, que convocó a la comunidad a acompañar esta lucha y promover una cultura de respeto y empatía hacia todas las especies.
Marco legal
La Ley N.º 14.346 sanciona penalmente a quienes sometan a los animales a malos tratos o actos de crueldad, incluyendo el uso de instrumentos que les causen dolor, la sobreexigencia física sin descanso ni hidratación adecuada, y la organización de espectáculos que impliquen sufrimiento innecesario.
Desde la asociación anticiparon que continuarán monitoreando las actividades del predio El Quebrachal y promoverán nuevas acciones legales y de concientización si no se adoptan cambios estructurales.
Llamado a la comunidad
“Condenamos enérgicamente toda forma de violencia y abuso hacia los animales, y reafirmamos nuestro compromiso con la defensa de los derechos de quienes no tienen voz”, concluyeron.
La denuncia generó fuerte repercusión en redes sociales, donde cientos de personas expresaron su indignación y exigieron intervención del municipio y organismos provinciales para controlar este tipo de eventos.
Redacción Edición Digital de Nueva Rioja.