Un tren de pasajeros que viajaba desde Klimov hasta Moscú se descarriló el sábado por la noche tras el colapso de un puente ferroviario en la región de Briansk, al oeste de Rusia y cerca del límite con Ucrania. El saldo, hasta el momento, es de siete muertos y 69 heridos, incluidos tres niños.
El gobernador regional Alexander Bogomaz confirmó la cifra de víctimas y señaló que el conductor del tren figura entre los fallecidos. El accidente ocurrió a las 22.44, según precisó Ferrocarriles de Moscú, la empresa operadora del servicio.
¿Qué causó el derrumbe?
Según un comunicado oficial, el incidente se debió al "derrumbe de un tramo del puente como consecuencia de una interferencia ilegal en las operaciones de transporte", una formulación que apunta a un posible acto de sabotaje, aunque hasta ahora no se brindaron más detalles sobre la investigación en curso.

En las redes sociales, circularon imágenes y videos que muestran la sección destruida del puente, varios vagones descarrilados y los trabajos de los equipos de emergencia.
Una zona de tensión
La región de Briansk ha sido escenario de incidentes desde el inicio del conflicto en Ucrania, con denuncias previas de ataques a infraestructura y sabotajes. Aunque no se ha confirmado un móvil específico, las autoridades rusas no descartan que el hecho esté vinculado a la guerra en curso.
Heridos y asistencia
Del total de 69 heridos, al menos una decena fueron trasladados a centros médicos con lesiones de gravedad. Los equipos de rescate evacuaron a los pasajeros restantes y se desplegó un operativo de asistencia y control en la zona afectada.