También dañaron el alumbrado público arrojando piedras contra las luminarias, dañando las mismas y dejando sin luz el ingreso al barrio El Alto.
A estos daños se suma otro hecho lamentable: arrojar basura en espacios que habían sido limpiados y acondicionados, como el terreno ubicado detrás de la Escuela N.º 114 Nicolás Lanzillotto, sobre calle México al fondo.
Estos actos no solo deterioran nuestro patrimonio cultural y los espacios públicos, sino que también ponen en riesgo la seguridad de toda la comunidad.
Cuidar lo que es de todos es un compromiso colectivo. Solo con respeto y responsabilidad lograremos una ciudad más segura y ordenada.
Con información de El Cronista Chepes