Los operativos se desplegaron sobre rutas y calles de la ciudad, bajo el Decreto 840 de la provincia de La Rioja.
Entre las 2:26 y las 5:40, los controles detectaron niveles de alcoholemia que fueron desde 0,40 hasta 0,77 gramos por litro. Un conductor se negó a realizar el test, lo que activó la multa máxima prevista. Se incautaron una camioneta, tres autos y una motocicleta.
Personal de Seguridad Vial y efectivos de las comisarías Primera y Segunda trasladaron los vehículos a las dependencias policiales, donde permanecieron hasta ser entregados a familiares habilitados. Las actas fueron labradas conforme a la normativa vigente.
Desde el 1 de agosto, las multas por alcoholemia en La Rioja alcanzan hasta $1.085.600, según el nivel registrado. Autoridades sostuvieron que la continuidad de los operativos es clave para reducir accidentes y frenar la conducción bajo los efectos del alcohol.
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