El lunes por la tarde se dio inicio al Centro Vocacional Cura Brochero. En la misa presidida por el Obispo, padre Dante Braida, se presentaron los tres candidatos que harán durante este año el camino de discernimieno vocacional al sacerdocio. También estuvieron presentes varios sacerdotes, seminaristas, diáconos de la diócesis y laicos quienes con mucha alegría celebraron este paso que implica un acompañamiento para que los jóvenes encuentren su misión en la Iglesia.
También en la Misa se entronizó una imagen de José Gabriel Brochero, nuestro Santo Sacerdote y el Padre Mauricio, responsable del Centro expresó su gratitud a la vez que pidió oracones y acompañamiento fraterno para esta nueva comunidad.
Esta nueva institución estará a cargo del Padre Mauricio Giménez y del seminarista Maximiliano Palacio quienes formarán comunidad junto a tres jóvenes que ingresan
En el preseminario, los postulantes tienen la oportunidad de vivir una experiencia de discernimiento profundo por medio de la cual, a lo largo de un año de discernimiento, acompañados por un sacerdote formador, un acompañante espiritual y en diálogo con el obispo puedan tener los elementos necesarios y suficientes para tomar la decisión de ingresar al seminario mayor, o buscar un camino de discernimiento alternativo que le permita descubrir cuál es su vocación.
Homilía del obispo
“Este es un día para dar gracias a Dios que conduce nuestras vidas y en este año Jubilar que Dios nos invita a poner la mirada en Jesucristo, el Hijo de Dios que se hizo hombre. En este tiempo que haya personas que se unan a su Historia de Salvación nos llena de esperanza. En un mundo afectado con dificultades el Papa quiso destacar en el Jubileo a la esperanza que nos invita a que descubramos sus signos que están presentes en la sociedad y que transmiten vida, amor, ganas de vivir y de desarrollar en la propia vida la propia vocación. La Apertura de este Centro Vocacional es también un signo de esperanza para la Iglesia y para toda la sociedad”, aseveró Braida ante los presentes.
“Nos preguntamos ¿para qué Dios me ha dado la vida? ¿cuál es mi lugar en la Iglesia, en la sociedad?. Ese discernimiento es una etapa delicada de la vida, es pensarse como persona y como cristiano; por eso este Centro Vocacional es un signo de esperanza porque será una ayuda para aquellos adolescentes y jóvenes que se están planteando de cara a Dios qué hacer con su vida”, acotó.
“Damos gracias por esta apertura, por estos jóvenes que han escuchado este llamado y nos han impulsado a generar este ámbito concreto para cultivarlo en un camino de crecimiento. Junto con ellos podemos poner el nombre de muchos adolescentes y jóvenes que quieren dar pasos concretos hacia el sacerdocio, la vida consagrada, la vida laical. Desde este lugar este Centro Vocacional busca abrir un espacio al discernimiento que comenzó en la Parroquia de La Merced con el Padre Jorge Hilal y ahora va a funcionar aquí, en el Centro Santo Domingo a cargo del Padre Mauricio Giménez y el seminarista Maximiliano Palacio, que si bien son responsables de esta etapa hay religiosas y laicos que estarán ayudando en la propuesta vocacional general como así también en la propuesta específica del sacerdocio de estos jóvenes”, agregó.
“Este también constituye un modo de Camino Sinodal que constituye también un camino formativo para todos. Pero la vida de estos jóvenes se da principalmente por un crecimiento de la mano del Señor, de crecer en la amistad con Él para que el Espíritu haga la obra valiéndose de muchas mediaciones. Deberán estar con el Señor, escuchar su Palabra, dejarse guiar por ella y discernir a partir de la Palabra escuchada”, añadió.
“De este modo la primera lección de este camino de formación es ser cada día mejores discípulos y amigos del Señor también con la Eucaristía. Este camino de discernimiento vocacional tiene que ser también un camino de conversión, a ser misericordiosos como el Padre es misericordioso. Se trata de una dimensión que el Papa Francisco siempre propone, es lo que dice el Evangelio de hoy: no juzguen, no condenen, perdonen. Que aquello que traten con nosotros encuentren corazones abiertos a la vez que ir viendo lo que tenemos que crecer y madurar”, aclaró.
“Queridos jóvenes, están dando un primer sí. En la primera lectura el profeta Daniel le ´pide perdón a Dios porque no han escuchado la voz del Señor. Es propio de este tiempo de cuaresma escuchar la palabra y darnos cuenta que seremos realmente felices si seguimos el camino del Señor”, determinó.
“Finalmente, querida comunidad, demos gracias a Dios por el inicio de este centro vocacional, por estos jóvenes que han escuchado la llamada y que con nuestra compañía van a ir atravesando diferentes etapas. Queridos chicos es una gracia poder ser acompañados, muchas personas van a estar para ayudarlos, pidan la gracia de la docilidad, de la disponibilidad hacia quienes los guíen; este tiempo los va a ayudar a madurar y a crecer sabiendo que la formación siempre es para el servicio, para la misión. Es un tiempo de visitar a la gente, de participar en diferentes comunidades que constituye también un espacio para saber qué es lo que Dios quiere de ustedes. Es un tiempo de discipulado que siempre es para la misión, para dar a los demás la riqueza que Cristo nos ha dado”, subrayó.
“Ser orantes pero también misioneros, saber que la vocación al sacerdocio es para el servicio del Pueblo de Dios, para el bien de los demás mostrando una Iglesia en salida, misionera, misericordiosa. Que este camino que hoy comienzan tenga esta impronta”, remarcó.
Cabe destacar que el preseminario surge a partir de la necesidad de poder brindar a los jóvenes una experiencia de discernimiento que acompañe su decisión final de ingresar al seminario. En el proceso de dar una respuesta al llamado de Dios, surgen diversas preguntas, dudas, temores que, por medio de este acompañamiento sistemático, tanto el joven como la Iglesia encuentran elementos en común que permiten alcanzar una instancia final de decisión madura.
Anteriormente, Braida, en una entrevista que fue publicada en la página de la Diócesis de La Rioja indicó que “en la pastoral social a nivel nacional hay un área que se llama “Nuevos Dirigentes” que tiene un buen número de jóvenes que participan de las organizaciones sociales, políticas, sindicales. Jóvenes que se van formando para asumir nuevas responsabilidades. Es un área que se puede fortalecer aún más para abordar otras temáticas. Es alentador ver más allá del ámbito de la Pastoral Social, jóvenes trabajando, atendiendo gente en situación de calle, comprometidos con sus estudios, el deporte, o en diferentes organizaciones sociales”.
Para leer y analizar detenidamente esta entrevista, se puede ingresar a: https://diocesislarioja.com.ar/monsenor-braida-presidente-de-la-pastoral-social-los-argentinos-tenemos-una-gran-sentido-de-la-caridad-y-la-justicia/.
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