Una multitud se congregó este martes por la tarde frente al edificio del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de La Rioja para expresar su malestar por el funcionamiento del sistema judicial. La movilización, de carácter pacífico, fue impulsada por la Asociación Madres del Dolor, que encabezó un reclamo colectivo por justicia, transparencia y celeridad en los procesos.
La concentración reunió a familiares y amigos de víctimas, así como a referentes judiciales y organizaciones sociales, que coincidieron en denunciar demoras prolongadas, causas archivadas y presuntos hechos de corrupción que afectan al servicio de justicia en la provincia.
Bajo la consigna “Entre todos podemos cambiar el sistema judicial actual”, los manifestantes exigieron la reactivación de expedientes que permanecen paralizados desde hace años, impidiendo que las víctimas y sus familias accedan a respuestas y reparación.
Durante la jornada, el vocal del TSJ Claudio Saúl se refirió en medios locales a la movilización y sostuvo que “el derecho a peticionar es constitucional y nadie lo va a obstaculizar”, aunque defendió el accionar del Poder Judicial.
“El sistema está actuando. Desde la creación de la Secretaría de Superintendencia en 2022 se tramitaron 443 denuncias, con sanciones a magistrados, funcionarios y empleados. Los datos son concretos”, afirmó el magistrado.
Saúl reconoció, no obstante, que existen demoras procesales en varios fueros, pero advirtió que “muchas denuncias no se basan en irregularidades sino en disconformidades con las sentencias, y eso se resuelve por vía recursiva, no administrativa”.
El reclamo ciudadano fue acompañado por distintas agrupaciones que exigieron una justicia más accesible, efectiva e imparcial, y que anunciaron la continuidad de un plan de lucha para mantener visibilizada la problemática en los próximos días.
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