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Política

Entrevista a la directora Ejecutiva de ANSES, Fernanda Raverta

Este miércoles, en las oficinas centrales de ANSES, la Directora Ejecutiva del organismo licenciada María Fernanda Raverta, charló con el Dr. Juan Pablo Chiesa, sobre el IFE, el rol de mujeres y disidencias en las políticas de Seguridad Social y el p

En un momento particular de la Argentina, donde el rol del Estado se vuelve fundamental para contener a la sociedad en medio de la Emergencia Sanitaria por la pandemia del COVID-19, Raverta explica las importancias de estas políticas publicas para los hogares argentinos y el papel principal de las mujeres en esta instancia.

JPCH:¿Existe como proyecto real el Banco Social dependiente de la ANSES y, en caso afirmativo, cómo podría compararse con el funcionamiento de otras entidades?

Desde la Anses estamos analizando distintos proyectos y propuestas, algunas que han estado planificadas desde este organismo que no se han llevado adelante y otras que por allí no estuvieron estudiadas desde el organismo que queremos analizar para más adelante, porque tenemos la obligación de hacer propuestas de construir una inteligencia común con otros ministerios, pero sobre todas las cosas de tener ideas para salir delante de la crisis que estamos viviendo. Una crisis que obviamente está profundizada por la pandemia, pero sobre todo una crisis que se generó a partir de una emergencia económica provocada por un modelo económico que le hizo mucho daño a los argentinos y argentinas en el gobierno anterior.

Entonces, desde el organismo, tenemos la enorme responsabilidad de construir una agenda de propuestas para poder ver su viabilidad, para poder estudiarlas, para construir una evaluación sobre el impacto y de esa manera poder contribuir a la etapa que viene que vamos a atravesar los argentinos y argentinas.

En ese marco, estamos analizando todas las propuestas que en el organismo hubieron antes, una de esas es el banco previsional, el banco social, el banco del organismo, pero por supuesto está en estado de evaluación.

JPCH: ¿Qué políticas existen pensadas entre Anses y el Ministerio de la Mujer específicas para mujeres y disidencias?

Hace poquito firmamos un convenio de colaboración con la ministra en el que, no sólo rápidamente instrumentamos la posibilidad de hacer denuncias de manera anónima en la página de ANSES, una página que tiene una cantidad enorme de visitas de argentinos y argentinas que están vinculados con nosotros a través de una prestación. Entonces nos parecía importante que desde allí las personas puedan ponerse en contacto con el ministerio y hacer denuncias.

Además trabajamos en las cuestiones prestacionales y previsionales de las mujeres. El impacto del Ingreso Familiar de Emergencia ha sido superior en las mujeres. Entre dos personas de la misma familia hemos intentado que el beneficio adjudicado sea para las mujeres, porque entendemos que hay mujeres que llevan adelante la enorme tarea de administrar los recursos de esa familia, de poner en la mesa un plato de comida. Así que tenemos distintas cuestiones prestacionales en las que compartimos el diagnóstico o la caracterización con el ministerio.

Además puntualmente, por ejemplo en la pensión que tiene que ver con aquellos niños y niñas que han vivido la desgracia de tener una mamá víctima de femicidio, que puedan tener su pensión. Obviamente tiene que ver con un derecho de los nenes, pero se instrumenta a partir del familiar que cuida de ellos, una abuela, una tía.

Y por supuesto también estamos instrumentando con el ministerio, todo lo que tiene que ver con la política de asistencia a las mujeres para prevenir y erradicar la violencia contra las mujeres y las violencias de géneros, para que este organismo sea protagonista. Pero además para poder poner a disposición del Ministerio, sobre todo en una nueva suerte pensión que está construyendo el Ministerio de las Mujeres no sólo la territorialidad, nosotros tenemos 201 UDAI, 168 oficinas, para donde poder hacer los trámites y que sea ágil, sino además la posibilidad de tener en cada boca de pago un instrumento desde el organismo ya agilizado para poder hacer operativa esa pensión.

Así que es mucha la agenda compartida, porque creemos que es un tiempo en donde los reclamos que tienen que ver con las mujeres, con las disidencias, con las cuestiones que hacen a esta deconstrucción que estamos viviendo los argentinos y argentinas son variadas, son heterogéneas, son muchas y nosotros tenemos que estar a disposición como con cualquier cuestión que tenga que ver con vivir e intentar vivir mejor en la Argentina.

Sabemos que la ANSES nació en el año 1991 y sos la directora número 14, sos la primera mujer en dirigir el organismo. ¿Qué significa para vos ser la primera mujer directora de este organismo?

Bueno, es una enorme responsabilidad por todo lo que te contaba en la pregunta anterior, por la agenda que las mujeres construimos, por la agenda que las mujeres deseamos construir en adelante, pero sobre todo por las conquistas que tenemos que ir logrando en la medida en que socialmente y culturalmente entendamos nuestro rol y la garantía de nuestro rol en cada uno de los organismos del Estado.

Este es un organismo de mucha sensibilidad, de mucha empatía, pero sobre todo de mucha inteligencia, porque alcanza a casi la mitad de los argentinos y argentinas, que están vinculados a este organismo a través de alguna prestación. Por lo tanto, el alcance de nuestras políticas públicas es enorme y por eso es muy importante que seamos las mujeres quienes podamos conducir estos lugares institucionales de semejante envergadura.

JPCH: Última pregunta María Fernanda ¿Me podés describir muy brevemente lo que significa el Ingreso Familiar de Emergencia para los argentinos y argentinas?

Bueno, es una política que no tiene relación con ninguna otra política de emergencia en ningún país de la región. Es una política que ha asistido y ha llegado en un momento de mucha complejidad para las familias argentinas, para que estén acompañadas, pero sobre todo para que puedan tener un ingreso de 10 mil pesos en donde casi 9 millones de argentinos y argentinas han podido de distintas maneras sumar ese ingreso o vivir únicamente de ese ingreso en este tiempo de pandemia. Y esto por qué lo digo, porque se pensó como un ingreso excepcional, por única vez, que en el transcurso de la pandemia y en el tiempo que se ha ido desarrollando esta crisis sanitaria, esta emergencia sanitaria que estamos viviendo fue necesario volver a instrumentar. Estamos próximos a que el Presidente de la Nación firme por tercera vez un decreto para poder instrumentar un nuevo cronograma de pagos. Esto quiere decir que es una asistencia directa, de transferencia de recursos a una población enorme de la Argentina, en la que son más mujeres que varones, en las que hemos detectado una enorme cantidad de jóvenes que tienen menos de 30 años que han recibido el IFE, que seguramente es una población a la que le cuesta mucho incorporarse al mercado laboral de trabajo. Por lo tanto es una política de asistencia en la emergencia, pero que ha permitido transcurrir este tiempo tan complejo de la mejor manera. Y por sobre todas las cosas es una política pública, es un derecho que de alguna manera pone sobre la mesa el enorme grado de desigualdad que vivimos los argentinos y argentinas y esta pandemia tiene que darnos la posibilidad de seguir después de la pandemia habiendo asumido la responsabilidad de mejorar las condiciones que genera ese grado de desigualdad. Condiciones que en algunas cuestiones tienen que ver con la precariedad habitacional, con los ingresos registrados y no registrados, porque también hubieron políticas para el sector asalariado o registrado como es el ATP. Pero sin ninguna duda, nos tiene que permitir poder clarificar el estado de desigualdad en que vivimos y construir respuestas a esa desigualdad con políticas públicas reparadoras.

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