La destrucción de empleos en la construcción marcó un nuevo récord en mayo, al registrar un descenso del 36% interanual, la mayor de toda la serie y superior al 34,6% que había registrado en abril. De esta manera, el sector acumuló una baja de 150.000 vacantes en relación al mismo mes del año pasado, a partir de una crisis iniciada en 2018 que se agudizó fuertemente por la pandemia de coronavirus.
De acuerdo a datos del sector, los puestos de trabajo registrados retrocedieron en 5.500, equivalentes a un 2% mensual, por lo que se ubicaron en 267.614. La variación frente al cuarto mes del año podría indicar una desaceleración en la magnitud de la caída, si se tiene en cuenta que en abril este porcentaje había sido del 14% y en marzo, del 4,9%.
Sin embargo, las mayores bajas se observan en el área metropolitana, que continúa sin poder retomar sus actividades por la cuarentena, y ya explica el 70% de las desvinculaciones totales, según las cifras difundidas por el Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (IERIC), que habló de una "relativa estabilización" en el empleo.
Es que en territorio porteño se registraron 3.217 desvinculaciones, la mayor cifra nominal, y una de los peores en términos relativos para la variación mensual, que en el distrito llegó a 5,8%. En tanto, en la provincia de Buenos Aires los despidos sumaron 2.119 (-4%). Así, junto con Neuquén, Córdoba y Santa Fue fueron las jurisdicciones más perjudicadas, mientras que las mayores mejoras en términos absolutos fueron para Tucumán y Mendoza.
En ese sentido, representantes del rubro consultados por este medio aseguraron que "la obra privada es el principal problema porque representa el 70% de la actividad, y en Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba está totalmente parada", comentaron a BAE Negocios. Las perspectivas tampoco son demasiado alentadoras, más allá de la intención del gobierno de dar impulso a un gran plan de obra pública. "El déficit fiscal está creciendo y no está claro cómo podría financiarse", se preguntó el empresario en diálogo con este diario.
"El panorama en el mes bajo análisis ilustra el escenario diferencial verificado a nivel nacional, en donde ciertas jurisdicciones continúan exhibiendo el impacto negativo propio de una cuarentena más rígida y otras manifiestan los efectos positivos correspondientes al proceso de flexibilización de la fase de aislamiento social obligatorio", evaluó el Ieric.
"La Ciudad Autónoma de Buenos Aires fue el distrito que contribuyó de manera más significativa a la disminución de la cantidad de puestos de trabajo registrados. Algo más de 4 de cada 10 (42,6%) puestos de trabajo perdidos durante el mes de Mayo correspondieron a este distrito, seguido en orden de importancia por las jurisdicciones que conforman el Gran Buenos Aires que explican el 28,1% del total. Por lo tanto, la Región Metropolitana en su conjunto es responsable del 70,7% de la caída bruta del empleo sectorial experimentado durante el mes de Mayo", puntualizó el Instituto.
"El mejor escenario relativo en el mes de Mayo se corresponde con una etapa de relativa mayor flexibilidad, que presenta una fuerte impronta territorial caracterizada por la habilitación progresiva de actividades, principalmente fuera de los grandes aglomerados urbanos", detalló el Ieric en el informe.
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