Ingredientes (15 porciones aprox.)
250 g de galletas de vainilla
350 g de nueces
350 g de dulce de leche para la masa
250 g de dulce de leche para rellenar
75 ml de crema
1 saquito de té (puede ser saborizado con canela)
3 claras
200 g de azúcar
Preparación paso a paso
Paso 1: Preparar el molde
Forrá un molde de torta de 18 a 20 cm con film plástico. Si usás uno más chico, la torta va a quedar más alta.
Paso 2: Moler galletitas y nueces
Procesá las galletas de vainilla (podés dejar algo de textura) y molé también las nueces. Reservá.
Paso 3: Infusionar la crema
Calentá la crema y agregá el saquito de té. Dejá infusionar 3 minutos, retiralo y mezclá la crema con 350 g de dulce de leche hasta que quede homogéneo.
Paso 4: Armar la masa
Uní las galletas molidas, las nueces y la mezcla de dulce de leche con crema. Primero mezclá con una espátula y después con las manos hasta lograr una masa uniforme.
Paso 5: Hacer la base
Colocá un tercio de la mezcla en el molde y aplastá bien para cubrir la base.
Paso 6: Rellenar con dulce de leche
Agregá una capa de dulce de leche (aprox. 125 g) y cubrí con otro tercio de la mezcla. Aplastá con las manos para que quede parejo.
Paso 7: Repetir capas y compactar
Sumá otra capa de dulce de leche y terminá con el resto de la mezcla de galletas. Cerrá bien y compactá. Reservá en heladera.
Paso 8: Preparar el merengue suizo
Poné las claras y el azúcar en un bowl a baño maría. Revolvé hasta que el azúcar se disuelva (probá frotando un poco entre los dedos). Retirá del fuego y batí hasta lograr un merengue firme y brillante.
Paso 9: Desmoldar y decorar
Dá vuelta la torta sobre un plato y cubrí con el merengue. Podés hacer picos decorativos o simplemente una capa pareja.
Tips y variaciones para potenciar la receta
Si no querés preparar merengue, podés cubrir la torta solo con dulce de leche y nueces picadas.
Usá té de canela o de chai para darle un toque especiado a la crema.
Si preferís, reemplazá las galletas de vainilla por galletas de chocolate para un contraste más intenso.
Guardala en la heladera hasta 3 días; los sabores se potencian con el frío.
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