En declaraciones realizadas ante la prensa provincial, Pérez expresó que observa con preocupación un vínculo que consideró “errático” entre el Gobierno nacional y las provincias:
“No lo veo con zozobra simplemente, pero sí me parece que estamos ante una estrategia de sometimiento sutil”, manifestó.
El ministro aludió a que las reuniones se diseñan para “ganar adhesión” más que para plantear acuerdos concretos de gobierno. A su entender, este tipo de convocatorias “interrumpen la democracia cooperativa entre provincias” y presionan los espacios autonómicos.
Pérez sostuvo que La Rioja mantendrá una agenda federal propia, independientemente de “juegos de escritorio” que transcurren en Buenos Aires, y ratificó que su gestión continuará con vínculos institucionales claros pero sin supeditarse a dinámicas de protagonismo nacional.
Asimismo sostuvo que, “esta semana se reúne con Llaryora y veremos cuántas viviendas van a hacer, o en que se va a ver beneficiada Córdoba”.
“No veo el sentido de las reuniones en la Rosada, porque es de dirigentes y no beneficia a los pueblos”, asumió.
«A mí en lo personal, me parece una psicopateada lo que hace Nación”, afirmó por otro lado, sosteniendo que a su entender, “si nosotros vamos y acordamos, no vamos a tener dinero para pagar sueldos”.