Frávega cerró su sucursal de Temperley, en Buenos Aires, y el hecho generó preocupación en el sector mercantil, ya que desde el sindicato advirtieron que la empresa podría avanzar con más despidos y cierres en distintas provincias. La situación se agravó este martes, cuando los empleados del local ubicado en Pasco y Salta se encontraron con las puertas cerradas, sin ningún aviso previo de parte de la compañía.
El Centro de Empleados de Comercio de Lomas de Zamora, Esteban Echeverría y Ezeiza (CEC Lomas) denunció “el cierre intempestivo de la sucursal” y cuestionó la actitud empresarial. Rubén Crosta, secretario general del gremio, sostuvo que la medida “es un acto de desprecio absoluto por quienes sostienen día a día el funcionamiento de la firma”. Además, recordó que este no fue el primer local que la empresa bajó en 2025, ya que otro cierre ocurrió en agosto en la ciudad de Pergamino.
En este contexto, el sindicato alertó por una posible avanzada de la empresa sobre más establecimientos y sobre el personal. “Tenemos información de que Frávega planea continuar con los despidos y estarían preparando el despido de 300 compañeros y compañeras en todo el país”, indicó Crosta al analizar la situación posterior al cierre de Temperley.
Ante este escenario, el CEC Lomas decidió realizar una denuncia formal ante el Ministerio de Trabajo, con el objetivo de resguardar los derechos de los trabajadores afectados. Al respecto, el secretario general explicó que el gremio va a “exigir la reincorporación inmediata. No vamos a permitir despidos ni traslados masivos disfrazados de decisiones empresariales”.
Los dirigentes gremiales también reclamaron que la empresa asuma su responsabilidad y dé respuestas claras. “Frávega debe dar explicaciones y reincorporar a los despedidos”, afirmaron a través de un comunicado que difundieron para visibilizar el conflicto en la región.