Por Sebastián Bertolosso / @sebabertolosso
Para 1983, en un momento de transición de su carrera y cuando nadie lo esperaba, el genial músico inglés tenía preparado el lanzamiento de lo que sería el trabajo más exitoso en toda su trayectoria. Los años '70 habían traído el desarrollo de los originales personajes creados por David Bowie, que iban desde la épica espacial de "Ziggy Stardust", su obra cumbre, hasta el soul paranoico de Thin White Duke en el genial Young Americans".
Como ya todos saben, Bowie fue un artista visionario y brillante con una facilidad asombrosa para navegar por los distintos estilos musicales transformándose disco tras disco, como por ejemplo desde el hard rock de "The Man Who Sold The World" hasta la mítica trilogía de "Berlín" que concluye con "Lodger", se puede constatar la mutación de un músico genial que estuvo siempre a la vanguardia, explorando todas las aristas sonoras posibles y siempre rodeado de magníficos músicos y productores que le ayudaban a concretar su visión.
La nueva década, la abría con "Scary Monsters" en 1980, su sólido décimo cuarto trabajo de estudio, en el que muestra una creatividad infinita para lograr el reconocimiento del gran público a través del género new wave y luego, al año siguiente, llegaría uno de sus mayores éxitos, ni más ni menos que su colaboración con Queen, para el inoxidable clásico "Under Pressure", con el que obtuvieron infinidad de premios y reconocimientos.
En 1982, Bowie estuvo mas dedicado a la actuación en cine y teatro, para los cuales compuso la banda sonora que incluyó el lanzamiento como single de "Cat People" ("Putting Out Fire"), que tuvo una muy buena recepción en las listas americanas y británicas. Ya para diciembre de ese año se había asociado con otro artista fundamental y de los más relevantes del disco y el funk como el guitarrista Nile Rodgers de Chic, a fin de conseguir ese sonido más pulido y accesible para el gran público, cosa que no gustó para nada a su socio y guitarrista en gran parte de su carrera Tony Visconti.
Siempre en la búsqueda de nuevos elementos que enriquezcan su propuesta musical, Bowie buscaba una nueva redefinición sonora con la intención de que esta vez lo acercaran a un mayor público. De este modo y luego de unas sesiones de grabación que transcurrieron con gran fluidez, "Let's Dance" fue lanzado el 14 de abril de 1983 a través del sello EMI, convirtiéndose así en el primero para esta discográfica luego de más de una década con RCA. Además, como nota de color, pasa a ser el primer disco donde el duque blanco decide no tocar ningún instrumento para centrar todos sus esfuerzo en la voz.
El álbum, abre con "Modern Love", con su estruendosa guitarra rasgada que define el ritmo antes de la hipnótica y contundente aparición de la batería, a medida que se va desarrollando una melodía pegadiza que la convertiría en un clásico instantáneo. El tema cuenta además con la participación de Tony Thompson de Chic que tras los parches tiene un rol brillante, mientras que un Bowie maduro reflexiona sobre las definiciones del amor moderno optando por una vida más organizada y estable.
A continuación, llega otro de sus grandes éxitos: "China Girl", que fue co-escrita junto a su gran amigo Iggy Pop, con quien ya la había lanzado en su álbum "The Idiot" de 1977. La canción, es una clara referencia al abuso de drogas como la heroína, así como el imperialismo del hombre blanco y su visión racista hacia otras culturas, que luego se vieron reflejados en el respectivo video musical donde critica al personaje masculino que domina a la supuesta y la sumisa cultura inferior representada en una mujer, lo cual también nos muestra que Bowie ya era una adelantado a su época en estos temas y que no se callaba absolutamente nada. Fue el segundo single del disco y liderá rankings en todo el planeta.
En tercer lugar y casi sin respiro, llega el tema que da el nombre a esta placa y que además se constituye en el éxito mas grande de toda su vasta y genial trayectoria. Inicialmente "Let´s Dance" fue concebida de manera acústica y ya mostraba los argumentos y la habilidad de Nile Rodgers para crear un contundente y extenso track bailable que nos trae una nueva cara del funk, inmerso en un contexto pop que a lo largo de siete minutos nos hipnotiza e invita al baile. Como si fuera poco la canción cuenta además con la participación del inolvidable y talentoso Stevie Ray Vaughan que se luce con un grandioso solo de guitarra que pone el broche de oro a un tema fenomenal. Su video fue grabado en Australia, y como en el caso anterior también sirvió como crítica a las culturas que se imponen sobre otras.
El lado A cierra con "Without You", un track en plan más calmo que nos invita al relax con Bowie genial que recorre todos los matíces de su gran voz que va de los graves profundos a unos falsetes exquisitos.
El lado B, inicia con "Ricochet", que de la mano de un ritmo sincopado hace referencia al creciente interés del world beat en la música pop occidental. Esta fue una decisión de Rodgers con la que Bowie, con los años, no estuvo muy de acuerdo ya que sentía que la canción no fluía del modo correcto, sobre todo en el estribillo que parecía ir a contramano de la canción.
Luego llega el turno de "Criminal World" que evidencia otra genial interpretación de David, en la que logra un mix híbrido de funk y pop/new wave con otra brillante participación en la guitarra de Vaughan. Como dato llamativo, nos encontramos que la misma fue prohibida en noviembre de 1983 por Radio One en el Reino Unido por su temática andrógina.
Para el tramo final del álbum llega "Cat People (Putting Out Fire)" con una nueva versión revisada y regrabada, ya que como mencionamos antes había sido parte de la banda sonora del filme "Cat People". Su música fue compuesta por el gran productor italiano Giorgio Moroder (productor de Donna Summer y hoy leyenda que goza de una nueva vitalidad de la mano de su participación con Daft Punk en su multipremiado "Ramdom Access Memories") y es otra aguda visión de la naturaleza animal de los seres humanos, especialmente en lo sexual.
El cierre llega con "Shake It", que viene a recordarnos con su alegre ritmo que este es un disco cuya clara intención es ser contagiosamente bailable y que nos deja dos grandes lecciones: que el amor es mejor que el dinero y que no hay mal que el baile no pueda resolver.
En definitiva "Let´s Dance" fue un álbum brillante con un nivel de producción sonora inmejorable, y con la participación de músicos de gran talento como Stevie Ray Vaughan que le permitió notoriedad fuera de su contexto blues, en tanto que Nile Rodgers se consolidó como productor ampliando sus colaboraciones con INXS, Duran Duran, Madonna y, años mas tarde, también con Daft Punk, por mencionar solo algunos de sus innumerables trabajos con artistas de primera talla.
De este modo, "Let's Dance" fue un excelente trabajo para entrar con el pie derecho en su nueva discográfica EMI y encandilar a un público masivo que estaba sediento de nueva música, en un momento en el que el new wave dominaba las escena musical.
Además, el disco fue reivindicado por innumerable cantidad de artistas siendo el caso mas destacable el de los Foo Fighters que lo citaron como influencia fundamental para la creación de su último disco "Medicine At Midnight", lo cual pone de manifiesto que "Let´s Dance" es un disco imprescindible para todos los amantes de la buena música.
Hasta la próxima.
Artista: DAVID BOWIE
Álbum: LET'S DANCE
Fecha de Lanzamiento: 14 DE ABRIL DE 1983
Duración: 39:41 MIN.
Producción: DAVID BOWIE - NILE RODGERS
Sello discográfico: EMI
Let's dance: cuando Bowie conquistó al mundo
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