Opinión

Los mercados también se infectan


Hace varios días los medios del mundo vienen hablando de este nuevo fenómeno que atraviesa China. En un primer momento, este virus se tomó como algo pasajero, que podría desaparecer por el propio contexto donde se desenvolvía. Lamentablemente, para los ciudadanos de Wuhan, fue justamente el contexto que los rodeaba lo que terminó potenciando la efectividad del virus.
Hoy ya hay más de 170 muertes, solo en China. Sin embargo, gracias a la alta conectividad que tiene la ciudad de Wuhan con el mundo ya se han localizado diversos focos de contagio en varios países del mundo. Para ver de cerca hasta dónde puede llegar, solo en Brasil más de 7.000 personas se han hecho estudios preliminares para detectar el virus, 127 de los pacientes pasaron a etapa de revisión. Algo parecido ocurre con Paraguay.
Ahora, si bien la salud de las personas es la cuestión principal a atender, no son los únicos bajo los efectos negativos de esta nueva cepa del virus. Junto a los cientos de infectados, los mercados financieros de todo el mundo parecen estar pasando una etapa de "infección", ya que se presenta a nivel general una caída al estilo dominó.
La semana bursátil comenzó con bajas en las principales bolsas del mundo, con una fuerte caída del petróleo y suba del oro. En Wall Street se operó con descensos de hasta 1,5%. El S&P500 se alejó de máximos históricos la semana pasada luego de que China bloqueó varias ciudades y limitó los viajes, lo que trajo nuevamente el miedo al pasado SARS, un virus que mató a más de 800 personas y generó costos de miles de millones para la economía mundial. Las acciones de empresas más afectadas por el miedo generalizado fueron las relacionadas con el turismo y los viajes, específicamente las de aerolíneas, casinos y hoteles.
Otro rubro del mercado que fue resentido por esta gran incertidumbre, fue el de las criptomonedas. Tal vez no lo sabían, pero China representa la mayor plaza de inversión en criptomonedas a nivel global, con el 40% de las 50 principales casas de cambio a nivel mundial, según la compañía de investigación Chainalysis. Los inversores han declarado estar preocupados por la posible interrupción de los negocios debido al coronavirus y el impacto que puede tener en el precio.
El presidente chino, Xi Jinping, se toma este tema muy seriamente, por ello pidió máxima efectividad y transparencia en los esfuerzos que hace su gobierno para contener la epidemia. También declaró que la ayuda internacional será fundamental para contener el virus y evitar que siga propagándose.
Cómo digo siempre, toda crisis representa una oportunidad, así que esta vez es bueno preguntarnos qué empresas podrían resaltar, por su importancia estratégica, si la variante que se desarrolla en China se transforma en pandemia.
Entonces, ¿qué empresas trabajaron en el caso del SARs y MERs y tienen experiencia? En el sector, Merk, Pfizer y Abbott han buscado desarrollar vacunas contra las epidemias de estos patógenos, pero siguen en etapas experimentales. Son empresas vinculadas a la demanda occidental más que China, que busca desarrollar por su cuenta líneas de investigación, y eso limita una solución. Merk y Pfizer son determinantes en la producción masiva, pero es Abbott la que investiga y puede desarrollar patentes propias.
Otra gran empresa que puede resultar beneficiada bajo este contexto es 3M, la gran abastecedora mundial de productos médicos, desde insumos para laboratorios hasta mascarillas para evitar contagios.
El punto interesante de todas estas recomendaciones es que todas estas empresas pueden operarse en Buenos Aires mediante Cedears y no hace falta tener una cuenta en el exterior. Son farmacéuticas y proveedoras por excelencia, con roles distintos ante un evento de pandemia.
La salud y protección de las personas siempre es y será una prioridad. En estas líneas sólo se recomienda cómo se puede actuar si tenemos la suerte de mirar desde afuera. Aquellos inversores con deseos de entrar en estas oportunidades, tiene que recordar algo: los mercados del mundo están realmente atentos a este tema, el potencial de China es tan grande, que sí el gigante asiático estornuda, al resto del mundo le agarra neumonía.


(*) Columnista financiero.

Estás navegando la versión AMP

Leé la nota completa en la web