En el marco de EVINOR 2015 que se desarrolla a partir de hoy en Chilecito, el presidente de la Cámara Riojana de Productores Agropecuarios (CARPA), Mario González, expresó su preocupación por la situación actual que atraviesa la vitivinicultura. Según indicó, “hoy las bodegas trabajan a pérdida”, producto de la caída del consumo interno y el fuerte impacto de los costos.
“Nuestro sector vive un momento muy complicado. El de los vinos es uno de los sectores que primero sufre cada vez que hay recesión económica y pérdida de poder adquisitivo, porque el vino no es un producto de necesidad básica y es de lo primero que la gente deja de comprar cuando no le alcanza la plata”, explicó.
El dirigente advirtió que la merma en el consumo y la retracción de las ventas obliga a que las bodegas vendan por debajo de los costos de producción, con un panorama que pone en riesgo la continuidad de varias empresas. “Algunas pueden aguantar, otras no. Es una ecuación difícil y esperamos que pronto se revierta, porque al sector le pega muy fuerte”, subrayó.
En este sentido, González destacó que los costos internos, la presión impositiva y la logística son más determinantes que el precio del dólar a la hora de evaluar la competitividad del sector vitivinícola.