Construida la bodega, se hizo cargo la Comisión fundadora de Nacarí presidida por Florencio Dávila San Román, junto al Dr. Alfredo Larguía Dávila.
Fue elegido primer Presidente de la Sociedad Dn. Pedro Zamora y secretario, el joven enólogo Carlos A. Iribarren, posteriormente Presidente por numerosos periodos.
A 81 años de su creación, se evoca su trayectoria, lideró primero en bordalesas y luego en damajuanas (primero forradas en mimbre), los célebres vinos regionales de La Rioja, posteriormente y al haber alcanzado la excelencia en la elaboración, logró un Torrontés Riojano que sorprendió en el año 1987 al jurado de Francia, otorgándole el Trofeo más preciado en los Concursos mundiales del vino, el llamado Oscar de Oro/ Vinexpo/Bordeaux.
Las vicisitudes de la actividad empresarial y de la cambiante industria del vino hicieron que cesara en su producción en 1999 pero su marca continua y la impronta de su calidad quedó grabada en la historia de la actividad.