El delantero Sebastián Driussi es nuevo refuerzo de River luego de su paso por el Austin FC de la Major League Soccer (MLS), por lo que afrontará su segundo ciclo con la camiseta del Millonario. El jugador de 27 años regresó al club que lo vio nacer futbolísticamente luego de que el conjunto de Núñez desembolsara 10 millones de dólares para concretar su traspaso.
Esta decisión marcó el cierre de una negociación extensa que finalmente resultó favorable para Marcelo Gallardo, quien fue clave en el retorno del atacante. Luego de concretarse el pase, River publicó en sus redes sociales un sentido mensaje. "Siempre se vuelve a donde uno fue feliz", en referencia al regreso del delantero.
Teniendo en cuenta que River está culminando su pretemporada en San Martín de los Andes y este viernes jugará un amistoso ante Universidad de Chile, se espera que Driussi recién se sume al plantel comandado por Gallardo a partir de la semana que viene.
La confirmación llegó después de que Jorge Brito, presidente de River, adelantara que había optimismo respecto al cierre del trato: "Somos optimistas, pero si no hay novedades en 24 horas se va a complicar".
La última oferta de River resultó decisiva para convencer a Austin, equipo que inicialmente había rechazado dos propuestas. Driussi, por su parte, manifestó desde el principio su deseo fue volver, impulsado por el llamado directo de Gallardo, lo que fue fundamental para la concreción del acuerdo.
El delantero desestimó propuestas económicas superiores, como la de Estudiantes a través del Grupo Foster Gillet, dejando en claro su preferencia por vestir nuevamente la camiseta millonaria.
Más de siete años después de su partida a Europa para jugar en el Zenit de Rusia y tras su destacada etapa en Estados Unidos, Driussi se sumó a la lista de jugadores que regresaron al club, junto a nombres como Lucas Martínez Quarta, Gonzalo Montiel y Enzo Pérez.
Durante su paso por Austin FC, Driussi demostró su capacidad goleadora. En su mejor temporada, 2022, fue el máximo goleador de la MLS con 25 tantos en 38 partidos, lo que recordó su explosión goleadora en River en 2017.
Sin embargo, en las últimas dos campañas su efectividad disminuyó, anotando 13 y 8 goles respectivamente en 30 partidos por temporada. A pesar de ello, dejó un legado como máximo goleador histórico del club texano con 51 goles en 115 encuentros.