En ese sentido, el presidente de Matacos se hizo notar y levantó la voz, esta vez con pruebas contundentes: fotos de la visita del Secretario de Deportes, profesor Jorge Córdoba, el acta convenio firmada y una imagen junto a varios candidatos, que corroboran una promesa de subsidio realizada hace 11 meses y de la cual no han recibido ni un solo peso. En contraste, los jugadores de Matacos, que representan a la institución y contienen a cientos de jóvenes, se ven obligados a vender pan y pollos, y a viajar en sus propios vehículos para poder competir.
La situación es aún más llamativa si se compara con el fútbol de Primera División, donde, según se denuncia, hay jugadores que incluso cobran por partido, evidenciando una brecha abismal en el apoyo económico.
Pero la inequidad no termina ahí. El rugby local, un deporte que el Club Matacos es el único en fomentar en la ciudad, también se ve gravemente afectado por la crisis económica. A diferencia del fútbol y el básquet, que sí reciben algún tipo de ayuda, el rugby se ve obligado a costearse absolutamente todo, sin percibir un solo peso de apoyo gubernamental.
La pregunta que resuena en el ambiente deportivo es contundente: ¿Qué dirá el Secretario [Jorge]Córdoba? Él visitó el predio de Matacos, dio el visto bueno al proyecto y conoce de primera mano la difícil situación del club. Sin embargo, la actual distribución de fondos se percibe como "igualmente injusta", una "mala y poco equitativa distribución del dinero" que privilegia a unos y deja en el desamparo a los clubes más humildes y a las disciplinas menos visibilizadas.
Esta disparidad genera un malestar creciente y pone en tela de juicio el criterio para el apoyo estatal al deporte en Chamical, dejando a varias instituciones luchando por subsistir en un contexto de promesas incumplidas y recursos escasos.
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