
En el segundo punto de la serie por los cuartos de final de la Liga Nacional de Básquetbol, Riachuelo volvió a caer en Córdoba, y ahora está 0-2 en la serie.
Instituto se quedó con un partidazo al imponerse por 94-83 y ahora la serie continuará en La Rioja, donde se enfrentarán el viernes y el domingo en el estadio Superdomo, donde Riachuelo está obligado a ganar los dos enfrentamientos, para forzar un quito y decisivo juego, que se realizaría el miércoles 17 en Córdoba.
El Eterno quedó 0-2 en el cruce de cuartos al caer por 83-94 ante Instituto
La victoria de los cordobeses se concretó con parciales de 27-19, 21-15, 18-27 y 28-22, donde Nicolás Copello fue el MVP del encuentro con 34 de valoración: 28 puntos, 7 rebotes y 2 asistencias, mientras que para el Eterno, Latraius Mosley fue el máximo anotador con 27.
El arranque fue Riachuelo quien impuso las condiciones, ya que sorprendió con un rápido 10-0 aprovechando las pérdidas de su rival y con Mosley en gran nivel ofensivo. Por su parte, Instituto logró un 7-0, con 5 puntos consecutivos de Luciano González y emparejo el tanteador. Desde ahí, con un buen ingreso de Nicolas Copello y una racha anotadora de Mateo Chiarini, la gloria manejo los hilos y terminó el primer cuarto arriba 27-19.
En el segundo período se vio lo mejor del Albirrojo. Con un triple de Copello y otro de Bautista Lugarini, los de Lucas Victoriano metieron un 6-0 y se alejaron en el tanteador: 33-19. El equipo de La Rioja no fue sólido en defensa y se desconcertó con el correr del reloj. Instituto lo aprovechó, se sintió cómodo y pudo fluir en ataque para cerrar el primer tiempo con tranquilidad: 48-34.

A la vuelta del entretiempo, los de Sebastián González reaccionaron, otra vez, de la mano de Mosley y Mariano Fierro y fueron achicando la brecha en el score. El Albirrojo no pudo mantener la intensidad atrás, pero estuvo en partido gracias a la diferencia del parcial anterior. Con algunas conversiones de Chuzo González, los de Victoriano cerraron el tercer capítulo 66-61 un tanto preocupados.
Los últimos diez minutos fueron de alto vuelo. Nicolás Copello y González tiraron del plantel glorioso, que promediando la mitad del parcial volvió a 14 (79-65), pero el Eterno no cedió y con Mosley a la cabeza descontaron para ponerse a tan solo dos posesiones largas: 80-86 a falta de 2.47 para el cierre. Sobre el final, Copello liquidó las acciones con un triple para levantar al público de la Gloria que no paró de cantar.
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