Por Horacio Martino
Para comenzar a hablar de reciclaje de materias primas y hacer tangible la economía circular, hay que comprender que este camino no es fácil. Requiere esfuerzos colaborativos entre organizaciones, una articulación público-privada, inversiones y programas destinados a la recuperación de reciclables. Este enfoque integral es fundamental para brindar oportunidades de creación de valor a muchas personas, entre ellos recuperadores urbanos y recicladores.
Se evidencia una creciente participación de la comunidad en este proceso de circularidad a través de distintas actividades vinculadas al reciclaje, aunque, a veces, de manera tímida. Estas acciones permiten transformar los envases de cartón ya utilizados en cartulinas, cajas, celulosa aislante térmica y acústica, placas tipo aglomerado o chapas de techo. Este proceso representa un enorme desafío, pero también una gran satisfacción, dado los logros que se han concretado en Argentina.
En el ámbito de la producción de envases, el reciclaje juega un papel fundamental en un proceso que abarca toda la cadena de valor. Desde la utilización de materias primas renovables, como el cartón proveniente de bosques gestionados de manera responsable y certificados FSC®, hasta su reciclaje. Esta práctica promueve la sostenibilidad en la industria alimentaria al pasar de un modelo de economía lineal de consumo y descarte, a una economía circular, donde cada recurso es valorado y utilizado de forma eficiente.
Sin embargo, reconocer la trascendencia de esta labor va más allá de la acción individual de una empresa. Implica comprender la importancia de trabajar en conjunto con una red de equipos gubernamentales, cooperativas de recuperadores, recicladores, emprendedores, sector académico y nuestros mismos clientes. Cada uno de estos actores debe comprometerse con la sostenibilidad para superar las tasas de reciclaje actual, con el fin de reducir el impacto ambiental y brindar oportunidades de inclusión cada vez más necesarias.
Asimismo, es fundamental que las compañías de consumo masivo adopten medidas que promuevan el reciclaje post consumo, como apoyar programas de recolección de envases, promover la educación sobre este tema en la sociedad y colaborar con sistemas de gestión de residuos.
Todas son acciones concretas que pueden contribuir significativamente a la creación de un ciclo de vida más sostenible para las personas y el planeta. Es por ello que, adoptar una perspectiva holística que abarque todas las etapas del ciclo de vida de un envase es fundamental para promover prácticas sustentables. Se requiere un compromiso colectivo inquebrantable con la responsabilidad ambiental.
Al unirnos en colaboración con una red de actores comprometidos estamos forjando un camino hacia un futuro donde el procesamiento y envasado de alimentos no solo sea sinónimo de innovación y eficiencia, sino también de respeto y preservación del medio ambiente para las generaciones presentes y futuras.
*Gerente de Sustentabilidad para Tetra Pak® Argentina y Paraguay
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