La Policía Bonaerense encontró un cuerpo calcinado en Brandsen e investigan si corresponde al de Lucas Escalante, el joven de 26 años que desapareció el 9 de diciembre con Lautaro Morello, a quien lo hallaron asesinado en un descampado de Guernica, hace 10 días.
Los efectivos policiales realizaron operativos el viernes y el sábado en un descampado ubicado a la vera de la Ruta 210, entre Brandsen y la localidad de Domselaar, de San Vicente. El cadáver calcinado estaba en una bolsa.
La zona fue recorrida por los agentes luego que se observara una pista en el celular de Lucas, ya que en ese lugar había tenido señal el lunes 12, cuando ya llevaba tres días desaparecido.
Debido a esto, la policía tenía dos hipótesis. Por un lado, sostenían que Escalante está con vida o que el dispositivo lo poseía uno de los implicados en el caso.
Después de que el operativo del lunes arrojara un resultado negativo, los efectivos bonaerenses siguieron al mando de los rastrillajes, aunque la familia de Lucas prefería que las fuerzas federales estuvieran al frente.
“Lo único que nos dijeron es que parecían huesos de vieja data y que no coincidían con el tiempo de la desaparición. Por eso lo siguen buscando vivo”, dijo Romina, la hermana de Lucas.
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