Ingredientes:
200 g de harina
200 g de muzarella rallada
50 g de queso rallado tipo duro
100 ml de aceite (si es de oliva, mejor)
variaciones posibles
mostaza suave
perejil picado
pesto
salame picado chiquito
Preparación paso a paso
Paso 1: armá la base
Poné en un bowl la harina, la muzarella rallada, el queso rallado y el aceite. Integrá con la mano o con cuchara hasta formar una masa blanda pero armada.
Paso 2: elegí tu sabor
Sumá a la masa una de estas opciones y mezclá para que se integre bien: una cucharada de mostaza, o una cucharada de pesto, o una cucharada de perejil picado, o 2 cucharadas de salame picado bien chiquito.
Paso 3: formá los bizcochitos
Tomá porciones pequeñas y formá bolitas del tamaño de una uva. Aplastalas apenas con la yema de los dedos. Deben ser mini.
Paso 4: horneá
Llevá a horno precalentado a 180° por unos 15 minutos, hasta que estén apenas dorados.
Paso 5: enfriá
Sacalos y dejalos enfriar en rejilla. Al enfriarse toman más cuerpo y textura
Tips y variaciones para potenciar la receta
Si querés un extra crocante, podés sumar una cucharada de semillas (sésamo o girasol) a la masa base
Si hacés dos sabores distintos, marcá la bandeja con papel de horno para poder identificar cuál es cuál
Guardalos en frasco hermético: duran hasta 4 días perfectos
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