Ingredientes para la base:
5 duraznos maduros
2 cucharadas de azúcar mascabo o rubia
1 cucharada de jugo de limón
½ cucharadita de canela
1 cucharadita de fécula de maíz
Ingredientes para el crumble:
100 gramos de harina común o integral
80 gramos de avena arrollada
80 gramos de azúcar mascabo
80 gramos de manteca fría en cubitos
50 gramos de almendras picadas o laminadas
½ cucharadita de canela extra
1 pizca de sal
Preparación del crumble de duraznos:
Paso 1: En un bowl, mezclá los duraznos con el azúcar, el jugo de limón, la canela y la fécula de maíz.
Paso 2: Volcá la mezcla en una fuente apta para horno, preferentemente de cerámica o vidrio.
Paso 3: En otro bowl, combiná la harina, la avena, el azúcar, la canela, la sal y las almendras.
Paso 4: Agregá la manteca fría en cubitos y desmenuzala con las manos o con un cornet hasta lograr un arenado grueso. No tiene que quedar homogéneo: los trocitos irregulares son lo que le dan textura al crumble.
Paso 5: Cubrí los duraznos con la mezcla del crumble sin presionar.
Paso 6: Llevá al horno precalentado a 180 °C durante 30 a 35 minutos, hasta que la superficie esté dorada y los bordes burbujeen.
Paso 7: Dejalo entibiar unos minutos antes de servir. Podés acompañarlo con helado de vainilla, yogur natural con miel o crema batida
Tips y variaciones para potenciar la receta
Si querés una versión más liviana, reemplazá parte de la manteca por aceite de coco.
En invierno, hacelo con manzanas o peras; en verano, con duraznos o ciruelas.
Agregá jengibre rallado o una pizca de cardamomo al relleno para un sabor más especiado.
Para más textura, espolvoreá almendras tostadas extra por encima al servir.
Comentarios