Fuego dentro de una montaña

Por Fernando Viano

Si hay un artista en La Rioja que sea referente esencial de una representatividad de esa riojanidad típica y característica que traspasa los límites de la Provincia para enquistarse en un escenario cultural en el que se diferencia de todo lo demás, esa artista es Gloria de la Vega. Si hay una artista que además de ser representante del paladar más exquisito de nuestra tierra vuelta popularidad es bandera de lucha frente a los embates de un centralismo que se torna cada vez más asfixiante, esa artista es Gloria de la Vega.

Sinónimo de fuerza, de resistencia, de empuje, pero también reflejo de lo colectivo, de lo global que se torna encuentro, Gloria de la Vega es esa voz que, rodeada de un entorno familiar fundamental y del afecto plural de quienes la acompañan y sostienen, no deja de elevarse para pronunciar desde lo más profundo de su corazón y de su alma -allí donde habitan el fuego y la montaña- ese compromiso inclaudicable con sus raíces y el anhelo siempre creciente de llevar la greda como un símbolo de identidad inquebrantable, sin importar ya el lugar en el que sus pies pisen o el aire que respire, porque el suelo que pisa y el aire que respira están recubiertos de harina y aromados de albahaca, envueltos en chaya, igual que los pliegues de su mirada, apuntando en lo permanente hacia la profundidad de un concepto que no sabe de flaquezas ni de tardanzas, porque la entrega es hoy y la cosecha será eterna.

Hacer un repaso del derrotero musical de una de las artistas riojanas por excelencia es caer en la cuenta de que su vida se resume en un canto, pero que a su vez ese canto se amplifica en una construcción de la hermandad de voces y expresiones que la acompañan, gracias a un trabajo incansable en el que su familia, los Hijos de la Chaya y Jorge Gigena, son sostenes de un camino de crecimiento y madurez que hoy se hace evidente en cada palabra, en cada reflexión, en cada pensamiento, pero también en cada presentación, en cada conquista de nuevos espacios que se abren a la cadencia de su melódico impulso vital, acorde tras acorde, golpeteo de caja tras golpeteo de caja, copla tras copla lanzada al viento de un abrazo que contiene. “...Nada resulta superior al destino del canto, ninguna fuerza abatirá tus sueños, porque ellos se nutren con su propia luz. Se alimentan de su propia pasión. Renacen cada día para ser. Es que la tierra señala a sus elegidos, no para su vanidad, sino para su sacrificio...”.

La máxima pertenece al maesto Atahualpa Yupanqui y, como tal, parece definir a la perfección el destino cantor de Gloria de la Vega. De hecho, es ella misma quien hace referencia a 1591 Cultura+Espectáculos sobre ese designio esencial, al afirmar haber sentido la fuerza de esa marca indeleble al leer al cantor popular: “Si has sentido el reclamo de la tierra, te espera una tremenda responsabilidad”.

Esa responsabilidad, la del reclamo de la tierra es la que Gloria de la Vega asume en cada presentación, en cada escenario. Y es, al mismo tiempo, el hecho que la ha llevado a trascender, a atravesar con su voz y su mensaje el simple hecho territorial, para convertirlo en una conquista del más allá, en la que la bandera de la riojanidad flamea desde su nombre, pero también desde la magnificencia del encuentro que propicia su arte poética, abrazadora siempre de todo lo próximo.

Por caso, sus más recientes actuaciones en reductos inherentes a nuestra cultura como Cósquín, donde además llevó toda la Chaya a recorrer sus calles, o Baradero, otro clásico para nuestro canto popular, o Cafayate, una de las cunas vitales de nuestro folklore, dan cuenta no sólo de su tarea titánica, sino también de su tiempo de recolección de los frutos de su ofrenda.

EN ESTE ÚLTIMO TIEMPO TE VIENEN OCURRIENDO COSAS HERMOSAS, QUE TIENEN QUE VER CON TU TRABAJO, PORQUE QUEDA EN CLARO QUE NADA LLEGA POR SIMPLE CASUALIDAD...

La verdad que sí, que es mucho trabajo. Y en este punto lo nombro a Jorge (Gigena) porque es un tipo que obviamente, como todos, tiene virtudes y defectos, pero para mí la virtud principal de él es esa inquietud, ese estar todo el tiempo tratando de generar un espacio, aunque en realidad la mayoría de los espacios que se generan es a través de una mirada compartida, en comunidad. A nuestra propuesta unimos la danza, unimos un sector de artistas plásticos o artesanos que se arriman con esa misma visión. El mensaje de la cultura está impreso en todo, en todas las manifestaciones del arte, esa es la mirada integral. Ese impulso de producir que lo lleva naturalmente Jorge genera en forma paralela todo el trabajo musical, la necesidad de estar presente todo el tiempo gestando cosas, generando cosas, moviendo el ámbito de la cultura local en Capital, y si se abren puertas para que lo podamos hacer en otros departamentos de la Provincia, mejor todavía.

¿CÓMO VIVISTE LA EXPERIENCIA DE COSQUÍN, EN ESE CONTEXTO DE ESTAR SIEMPRE GENERANDO ALGO NUEVO?

Cuando nos confirman la presentación de Cosquín, en el Festival, nos damos con que era el 2 de febrero y no estar en La Rioja para esa fecha era como un pecado; ¡¿cómo no estar el primero en febrero, cómo no estar en la vigilia, en la marcha de los chayeros?! Sabemos que todo pasa en febrero en La Rioja, entonces Jorge dijo: ‘ya está, hacemos la chaya en Cosquín’. Desde que nos enteramos de la presencia en Cosquín, que fue a fines de octubre, él empezó a viajar y a tejer una red con algunas personas de Cosquín, del Centro Cultural Zamora, cuyo encargado es Cristian Viglietti, y encontramos la casa de una mujer que fue una bailarina que inició con el malambo en Cosquín, con toda una tradición, y nos conectamos con la manager de Bruno Arias que tiene una cooperativa que se llama ArteCoop y nos ayudaron e impulsaron a abrir algunos caminos, algunas puertas para generar cosas. Empezamos entonces a trabajar con esta idea de Jorge, con esta propuesta de llevar la Chaya a Cosquín, y logramos que la comisión del Festival y la gente de espectáculos callejeros nos cedieran el último día del Festival para hacer nuestra Chaya, que fue todo un acontecimiento. Sabíamos que no íbamos a estar en La Rioja, pero sabíamos también que íbamos a llevar a La Rioja al Festival.

¿QUÉ TE PASÓ ESTANDO AHÍ? ¿QUÉ SENSACIONES, QUÉ EMOCIONES VIVISTE EN ESE MOMENTO?

Nos pasó de todo, porque a la vez que había gente que nos ayudaba a resolver un montón de cuestiones, había otra parte que por ahí generaba vacíos; pero aún así, cuando estábamos ahí, cuando empezamos la marcha por las calles de Cosquín, dijimos: ‘hay que hacerla como sea, así seamos cinco’. Iniciamos la marcha y vimos que se había sumado la gente de Sanagasta y de Aimogasta, la Chaya del Arbolito, gente nuestra, que cuando nos miramos entendemos de lo que hablamos, fue muy contenedor, fue un abrazo súper esencial e importante para ese puntapié, para sentir que estábamos apoyados por nuestra gente, por la gente de La Rioja, por los barrios populares, artistas que se sumaron, gente que por primera vez hizo un topamiento. Vivimos una adrenalina que para muchos fue la primera vez y quedaron atrapados en esa vivencia. Creo que de eso se trata, de una movida que más allá de nuestro trabajo artístico hace que La Rioja, que nuestra cultura, trascienda siempre; sentir que estamos aportando de alguna manera o tratando de devolver a La Rioja un poquito de todo lo que nos nutre: el barrio, la juntada con amigos para hablar de nosotros, de los riojanos. Fue increíble, impresionante.

A NIVEL COLECTIVO TIENE ESA TRASCENDENCIA QUE REFLEJÁS EN TUS PALABRAS, PERO A NIVEL INDIVIDUAL, ARTÍSTICO, EL HECHO DE ESTAR EN CÓSQUÍN, ¿QUE TE SIGNIFICÓ?

Es un trabajo muy intenso. Volvimos a ver la presentación con Jorge y nos emocionamos porque es mucho el esfuerzo, mucho el amor que se pone. Son muchos años con la familia acompañándonos y podemos decir que se puede llegar sin el aparato del mercado, que es el que obliga. Fuimos con una propuesta muy identitaria y diferente, muy de La Rioja, que rompió con un esquema de lo que veníamos viendo y me sentí muy emocionada, muy compenetrada y muy concentrada también porque el escenario te lleva también a dar lo mejor.

¿QUÉ SENTISTE AL ESTAR ARRIBA DE ESE ESCENARIO QUE TIENE TANTA HISTORIA Y TANTA TRADICIÓN?

Uno está atrás en un primer momento y trata de contener la adrenalina, de estar calmos, porque a veces esa adrenalina te juega en contra. Muchas veces en lo personal, esa adrenalina me ha jugado en contra porque por ahí uno no puede controlar las emociones. A nivel musical uno ve que siempre falta algo, que no es perfecto y para mí está bueno que no sea perfecto, que siempre haya algo para mejorar, pero en ese momento sentí que éramos la Rioja, que éramos un grupo más allá de mí, con los bailarines, los compañeros y compañeras de la danza, que los amo. Todo eso es muchísimo para mí, y todos somos uno. Todos los que estábamos ahí éramos La Rioja y de lo que se trataba era de poner en alto a La Rioja más allá de los personalismos, cuestión que no es fácil, porque los egos muchas veces están. Nos unimos en esa energía, pensando, concentrándonos. Tenerlo al ‘Tubo’ Moya, por ejemplo, es toda la representación de una generación. Él resume todo ese mundo que heredamos, es el nexo, además de ser uno de los cantores que lleva impreso en su garganta el sonido de La Rioja y que ha mamado la cultura con los próceres locales. Es muy importante para mí poder tenerlo. Fue muy emocionante recibir el saludo de mucha gente de La Rioja y que te digan ‘nos sentimos representados por ustedes’. Ya está, es como tocar el cielo con las manos. Cuando recibimos todo eso fue impresionante. Es un camino largo, que tiene muchas vivencias, mucha Chaya, mucho patio, mucha guitarreada, mucha escucha, mucho aprendizaje, muchos errores también que por ahí nos bajonean, pero que se pueden mejorar, ir perfeccionando.

¿QUÉ ES LO QUE TE MOVILIZA PARA PODER LLEGAR HASTA ESE LUGAR?

Para llegar ahí, que es el objetivo final, yo creo que es la bandera de La Rioja como cada uno de los pueblos, hermanados en el respeto de la diversidad y en el amor hacia las otras culturas que son diferentes a la nuestra y de las que también aprendemos. El sonido del litoral no puede ser tan hermoso, pero es justamente la idea el lograr que el del litoral, cuando escuche, diga ‘ese sonido es La Rioja’. Yo quiero que digan ‘eso es La Rioja’. El objetivo trasciende nuestro tiempo y heredamos de muchos que vienen trabajando en ese sentido, y nosotros ponemos en lo que nos toca, en este momento de la vida, lo que es nuestro deber, porque nosotros hemos tomado esas banderas. Entonces, ese es nuestro deber. Pero digo, volviendo a esto del objetivo, del hecho artístico en un festival o en la Chaya, todo lo que acontece en la previa, todas las puertas que uno golpea, las amarguras que uno vive, nadie las sabe. La amargura, pero también la felicidad cuando alguien te toma de la mano y te dice: ‘yo te ayudo’. En eso soy tremendamente agradecida, por la confianza en el trabajo que hacemos. Por eso recurrimos al Gobernador, por ejemplo, para que nos apoye en esto que trasciende, que es nuestro proyecto artístico, pero que es más que nuestro proyecto artístico, porque es un proyecto cultural. Y que apuesten a lo nuestro y que nos pregunten qué hace falta para que se pueda hacer, ese apoyo, es algo que eternamente agradecemos porque sin esos apoyos nosotros no podríamos hacerlo, sería muy difícil. Y en esto de Cosquín, hubo muchas instituciones que se sumaron; también Canal 9 se sumó para poder transmitir desde el lugar y eso yo lo agradezco inmensamente.

LAS PUERTAS QUE SE ABREN, SIN EMBARGO, TIENEN QUE VER CON TU TRABAJO. SI HAY ALGO QUE TE DIFERENCIA, CREO YO, ES ESTO DE ABRIR EL JUEGO. MÁS ALLÁ DE QUE SEA TU VOZ, TU PRESENCIA EN EL ESCENARIO. HAY UN ABRIR EL JUEGO A OTRA GENTE Y A LA RIOJA, ¿SENTÍS QUE DE ALGUNA MANERA SOS UNA REPRESENTANTE DE LA RIOJANIDAD EN ESTO DE MOSTRAR LO QUE SOMOS?

Yo no podría decirlo... porque creo que somos todos, de alguna forma. Más allá de mi voz hay mucho trabajo, desde el vestuario que Maricel Andrada me aporta, desde la poesía de nuestros escritores, desde la música de los compositores; es un vehículo mi voz, pero también en todo lo que uno puede poner desde lo amoroso, desde la convicción. Quizás para mucha gente yo sea una referente, una representante, y quizás para otros no, pero eso no va a quitar jamás la fuerza interna de sentir esa necesidad. Hay un poema que es de Atahualpa Yupanqui que dice: ‘Si has sentido el reclamo de la tierra, te espera una tremenda responsabilidad’. Podrán negarte los otros, pero vos sabés internamente que hay algo que te impulsa, que no sé de dónde viene, pero te impulsa y tomás la bandera. Cuando yo leí eso es como que me hubiera caído, como que me hubiera recordado la memoria de mis reencarnaciones, que ese era mi deber.

¿LO SENTÍS ENTONCES COMO UNA RESPONSABILIDAD A LA QUE NO PODÉS RENUNCIAR?

Yo leí esas palabras de Yupanqui y dije: ‘a esto lo tomo porque lo siento, esto es mío’. Mucho me cuesta hablar de mí porque siempre me pienso en esto de abrir el juego; es imposible hacer un camino solo, es aburrido y es triste, ¡es triste! Cuando vos ves que los bailarines están entregándolo todo, es una energía que nos alimenta; las bailarinas cuando entregan esa elevación, estoy yo también ahí, en esa energía. Abrir el juego tiene que ver con que la energía, cuando fluye y cuando es compartida, se potencia, y eso lo tiene Jorge muy presente, él es quien produce el espectáculo y tiene la misma mirada de la apertura del juego, porque él siempre se encargó de esa tarea, es su tarea. Entonces cuando hay un espectáculo, un evento, siempre está pensando en qué artistas puede haber, pensando en la dinámica del espectáculo. Yo creo que esa apertura es un poco el amor convidado, decir que hay espacio para todas, para todos, hablar si hay algunas diferencias, que sea un espacio para sembrar.

¿CUÁNTO SUMA A ESA CONCEPCIÓN ARTÍSTICA TUS EXPERIENCIAS CON LAS CHAYAS DE GLORIA DE LA VEGA, QUE ES OTRO TRABAJO IMPRESIONANTE?

Tuvimos el primero de febrero la Chaya en Cosquín y al otro día era nuestra presentación en el Festival, una locura. Luego venimos a La Rioja y el 7 hacemos nuestra Chaya. La energía sale, no sé cómo pero sale. Se fue construyendo esto de hacer, de ser los que invitamos y se va construyendo una comunidad de gente que nos apoya, que nos sigue, que nos contiene. Amigos que levantan el teléfono y preguntan qué nos falta resolver y que nos dan una mano.

Y DE PRONTO TENÉS EN EL ESCENARIO A UNA BRUJA SALGUERO...

Me encantó cuando la Bruja hizo su programa ‘De Jazmín y Acero’, que creo que fueron cuatro programas invitando a mujeres de diferentes ámbitos de la cultura y fue a casa a hacerme una nota, compartimos un montón. Una artista como la Bruja, que trascendió nuestra Provincia, que está construyendo un camino artístico impresionante en Buenos Aires, que ha logrado reconocimientos muy importantes y que no se olvidó su tierra, que no se olvidó su gente; eso es muy potente. Estoy inmensamente agradecida con la Bruja, también con Bruno Arias que en este último tiempo me invitó a Cafayate y además se vino también a nuestra Chaya, con esa misma mirada de comunidad. Por eso yo creo que las cosas se hacen, porque te vas encontrando con gente que tiene esa mirada sobre la cultura, sobre la música. Hicimos Cafayate y también estuvimos en Baradero, gracias a esas generosidades que me enseñan muchas cosas. Venimos aprendiendo, porque nos vamos abriendo también a otras miradas. Estoy muy feliz por todo lo que viene sucediendo. También estuvimos en Catuna, en Chilecito, en la TV Pública, acá en La Rioja y en Buenos Aires, con todo lo que significa en este momento.

...MOMENTOS DIFÍCILES PARA LA CULTURA...

Sabemos que la cultura está muy golpeada y lo sabemos todos, no hace falta que yo lo diga; hay un mensaje permanente de violencia, de odio, e intolerancia, sin cabida para la diversidad, para el que tiene perspectivas de vida diferente, sin cabida a nada... Cada uno elige la forma de luchar y todas son válidas; por ejemplo puede salir una marcha para seguir reclamando por la restitución de derechos que nos están quitando, porque la realidad es que la marcha no es por avanzar, sino para que nos restituyan, pero más allá de eso creo que los otros mecanismos que hay que cubrir tienen que ver con lo cultural, por eso nos golpean tanto: ¡porque es tan poderosa una canción! Una canción puede mover los corazón de miles, de millones de personas. Entonces digo que hay una forma de luchar que tiene que ver con las banderas de la cultura, desde las canciones, desde sentirte orgulloso de lo que sos, de tu identidad. Lo peor de todo está en el peligro de naturalizar, en que nos acostumbremos a escuchar locuras. Hay una radiografía álmica, podríamos decir, de las generaciones que creo que la traduce muy bien Ricardo Mercado Luna, esto de La Rioja no reconocida. Todo el Noroeste, pero La Rioja en particular. Yo creo que es una cruz; esto es por ser de la tierra del Chacho, de Facundo, es el castigo que trasciende las épocas por habernos atrevido. Es terrible la negación. Esta negación que hay desde el puerto, desde donde se busca disolver al país, todo lo que se logró como Nación. La Rioja no tiene cabida para ellos, no existimos. Por eso nos enseñan a avergonzarnos de nosotros, a menospreciarnos. Entonces, cuando uno levanta la bandera del orgullo de la cultura, eso es lo que ellos quieren romper. Levantar la bandera de La Rioja tiene ese trasfondo. La Rioja no es solo Chaya. Eso es lo que contiene cuando nos pensamos en escena.

ENTRE FUEGO Y MONTAÑA

Desde el instante en que Gloria de la Vega evoca el sueño de ser “fuego dentro de una montaña”, se abre un universo en el que la tierra de La Rioja se convierte en el crisol de su inspiración y fuerza vital. Desde ese lugar de profundidad sustancial nos invita a conocer el latido conmovedor de sus raíces, en donde la música y la familia se entrelazan en una danza incesante de amor y sacrificio, pero también de rebeldía. Su relato es el de una mujer que, consciente del poder transformador de su canto, se sumerge en la maduración personal y cultural, asumiendo la responsabilidad de ser portavoz de un territorio que, a pesar de sus contradicciones, arde con la intensidad de un fuego eterno.

¿SENTÍS QUE ESTÁS VIVIENDO TU MEJOR MOMENTO A NIVEL ARTÍSTICO O SENTÍS QUE LO MEJOR TODAVÍA ESTÁ POR VENIR?

No sé si es el mejor momento, pero sí que es un momento espectacular. Y siento agradecimiento por todo lo que estamos viviendo, agradecimiento pleno. Que tenemos más aspiraciones y ambiciones de las buenas, claro que sí. Creo que pueden venir mejores cosas. Yo quiero que por lo menos Latinoamérica sepa de La Rioja. No sé si en esta vida lo voy a cumplir o si será en otra. Nunca es suficiente, porque el mercado no se detiene nunca y tiene el poder de un pulpo, pero no nos tenemos que detener; es la constancia, no se puede parar. La batalla cultural es realmente una consciencia y Gloria de la Vega es La Rioja, es Argentina. Quiero ir al Sur, porque también siento que quieren mutilar a la Argentina por todos lados y siento que hay mucho dolor en el Sur. Uno se siente hermanado en el dolor, en el espanto. De alguna forma lo vamos a hacer. Pero al margen de eso, es un momento espectacular.

EN TU CASO EN PARTICULAR, RESULTA INEVITABLE VINCULAR LA MÚSICA CON LA FAMILIA, ¿CÓMO TE LLEVÁS CON ESO?

Es complicado, porque a veces se mezclan los roles, no podemos separar. Estamos cocinando y estamos hablando de la música. Es nuestra vida, no lo podemos separar. Hay una hija, Juli, que ya decidió un camino de música y que ya encara sus propios proyectos y ahí aparece la mamá que la mira con la admiración de su crecimiento y con los temores propios de querer que no le pase nada. Se habla mucho de música en casa, todo el tiempo. Estamos todo el tiempo pensando en qué se viene, en qué podemos hacer.

HAY UNA INQUIETUD CONSTANTE, NO TE QUEDÁS CON EL “MOMENTO ESPECTACULAR”, Y EN BASE A ESTO, Y LA MADURACIÓN QUE SE HACE EVIDENTE EN TUS FORMAS DE DECIR, DE EXPRESAR, DE ASUMIR TU RESPONSABILIDAD, DEBO PREGUNTARTE UNA VEZ MÁS: ¿QUÉ ES EL CANTO, QUÉ ES LA MÚSICA PARA VOS EN ESTA EVOLUCIÓN PERSONAL? ¿QUÉ ES LA RIOJA PARA VOS?

Es muy difícil definir qué es, pero yo creo que es mi razón de ser, mi amor y mi misión. Hay gente que dice que no sueña nunca, o que nunca se acuerda de lo que sueña. Yo tengo sueños muy vívidos. Me soñé fuego dentro de una montaña y una vez, yendo por la Circunvalación, pasando el Parque de la Ciudad, miré de pronto la montaña y dije: ‘esa es la montaña que yo soñé’. ‘Fui piedra’, dije, en esto de saber que la tierra es un ser más latiendo y por algo latimos nosotros; si la tierra no tuviera su propio latido no existiría la vida. En esa consciencia pensé que mi primera reencarnación fue en La Rioja. No se si soy demasiado soñadora, pero hay cosas vívidas de los sueños que me convencen más de la reencarnación y que quizás La Rioja me duela tanto o me haga tan feliz, que son dos cosas maravillosas. El hecho de sentir es maravilloso, y pienso que ese primer sentir pudo haber sido acá. Quizás esta vez la reencarnación me regaló volver a mi primera encarnación, a mi lugar, a mi tierra, a esta greda que la veo y la entiendo, que la veo y palpo La Rioja. Creo que es el alimento del alma. La Rioja ha sido la fuente de toda mi inspiración; no sabría qué podría pasar si me alejara, por eso me cuesta tanto irme de La Rioja. La vida me dio la oportunidad de nacer aquí de nuevo, ¡¿cómo me puedo ir?! Creo que la raíz fundamental, de inspiración de este canto, de este sentir, es esta tierra árida pero amorosa, dolida de árida, pero que como puede sale un agüita y te da algún fruto, y no quiere dejarme. Me siento como ella, me siento como esa tierra dolida pero que busca darte un amor. Eso es lo que quiero, contagiar ese sentimiento. Eso es todo lo que quiero.

Gloria de la Vega encarna en su relato la pasión y el compromiso inquebrantable con sus raíces, transformando cada experiencia en una canción de resistencia y pertenencia. Su testimonio revela a una artista que, a través de la fusión entre música, familia y tierra, se convierte en portavoz de La Rioja y en símbolo de un canto que trasciende fronteras. Con la fuerza del fuego interior y la solidez de la montaña, invita a sentir el latido de un territorio que, a pesar de sus desafíos, se renueva en cada nota y en cada abrazo colectivo.

SOBRE GLORIA DE LA VEGA

NACIDA EN LA RIOJA, GLORIA DE LA VEGA, ES UNA DESTACADA INTÉRPRETE DE LA MÚSICA POPULAR ARGENTINA, RECONOCIDA POR SU VERSATILIDAD EN GÉNEROS COMO LA CHAYA, VIDALA, CHACARERA, ZAMBA Y TANGO. SU CARRERA ARTÍSTICA SE CARACTERIZA POR UN PROFUNDO COMPROMISO CON LA CULTURA Y LAS TRADICIONES DE SU TIERRA NATAL.

DESDE TEMPRANA EDAD, GLORIA MOSTRÓ INTERÉS POR LA MÚSICA, INICIANDO SU CAMINO ARTÍSTICO EN LA AGRUPACIÓN CORAL KUNTUR. POSTERIORMENTE, CONTINUÓ COMO SOLISTA DURANTE SUS ESTUDIOS SECUNDARIOS, LO QUE LA LLEVÓ A GANAR EL PREMIO SEPTIEMBRE JOVEN EN 1997, OBTENIENDO ASÍ LA OPORTUNIDAD DE GRABAR SU PRIMER DISCO. A LO LARGO DE SU CARRERA, HA PARTICIPADO EN NUMEROSOS CERTÁMENES Y ENCUENTROS CULTURALES, REPRESENTANDO A LA RIOJA EN FESTIVALES COMO COSQUÍN, EL FESTIVAL DEL PONCHO EN CATAMARCA, LA CHAYA Y EL FESTIVAL HOMENAJE A MERCEDES SOSA EN BUENOS AIRES, ENTRE OTROS.

ADEMÁS DE SU LABOR COMO INTÉRPRETE, GLORIA HA SIDO CONVOCADA PARA PARTICIPAR EN DIVERSAS OBRAS POÉTICO-MUSICALES, TALES COMO “MUJERES ARGENTINAS” DE FÉLIX LUNA Y ARIEL RAMÍREZ, “LA RIOJA MÁGICA”, “SUELO BENDITO” Y “CIUDAD DE EMOCIONES” DE CÉSAR TORRES, “BARRANCA YACO” DE JULIO OLIVERA CHAZARRETA, “TAKI ONGOY” DE VÍCTOR HEREDIA, “LA CANTATA RIOJANA” DE DAVID GATICA Y RAMÓN NAVARRO, Y “PADRECITO DE LOS POBRES” DE PICA JUÁREZ Y RAMIRO GONZÁLEZ.

DISCOGRAFÍA

LA PRODUCCIÓN DISCOGRÁFICA DE GLORIA DE LA VEGA INCLUYE CINCO ÁLBUMES:

ATÁVICA (2009)

YO TAMBIÉN SOY (2012)

MUJER LATINOAMERICANA (2015)

FLOR DEL ARRABAL (2016)

HIJOS DE LA CHAYA

ADEMÁS, HA COLABORADO COMO ARTISTA INVITADA EN DIEZ MATERIALES DISCOGRÁFICOS ADICIONALES, DESTACÁNDOSE SU PARTICIPACIÓN EN “TAKI ONGOY”, “EL CANTO DEL POETA” (HOMENAJE A ARIEL FERRARO), “LA RIOJA CANTA EN NAVIDAD” Y “LA RIOJA EN LA SANGRE” JUNTO A LA ORQUESTA MUNICIPAL.

LA PROYECCIÓN INTERNACIONAL DE GLORIA LA HA LLEVADO A PRESENTARSE EN PAÍSES COMO CHILE, BOLIVIA, COLOMBIA, BRASIL, CUBA Y MÉXICO. EN 2014, PARTICIPÓ EN EL CONGRESO INTERNACIONAL “PRESENCIA DE PAULO FREIRE” EN CUBA, CON ACTUACIONES EN CIENFUEGOS Y LA HABANA. POSTERIORMENTE, REALIZÓ UNA GIRA POR MÉXICO, OFRECIENDO 14 PRESENTACIONES EN CIUDADES COMO CANCÚN, PUEBLA Y CIUDAD DE MÉXICO.

ADEMÁS, GLORIA DE LA VEGA HA SIDO UNA PRESENCIA CONSTANTE EN FESTIVALES DE RENOMBRE. EN ENERO DE 2022, JUNTO AL ARTISTA PICA JUÁREZ, PRESENTÓ “LA CHAYA” EN EL FESTIVAL DE COSQUÍN, COMPARTIENDO LA RIQUEZA CULTURAL DE LA RIOJA CON UNA AUDIENCIA MÁS AMPLIA.

TAMBIÉN HA PARTICIPADO EN FESTIVALES COMO EL DE BARADERO Y CAFAYATE, CONSOLIDÁNDOSE COMO UNA FIGURA REPRESENTATIVA DE LA MÚSICA POPULAR ARGENTINA.

EL CEREBRO DETRÁS DE LA PASIÓN POR LA RIOJANIDAD

En más de una ocasión a lo largo de la entrevista con 1591 Cultura+Espectáculos, Gloria de la Vega hace referencia a Jorge Gigena, el productor musical y compañero de vida que la acompaña y sostiene en su camino artístico y que es parte esencial de una propuesta de riojanidad que no para de crecer y que, como tal, trasciende las fronteras de nuestro territorio. Ese concepto integrador, global, que suma diferentes facetas artísticas al canto de Gloria y los Hijos de la Chaya, encuentra en Jorge la esencia del abrazo, pero también la maquinaria inagotable del cerebro que apuntala la pasión por lo nuestro vuelta canción, la tradición riojana que conquista escenarios como los de Cosquín, pero incluso algo más importante aún: las calles por las que se pasean nuestras historias enharinadas y el anhelo de llevar a La Rioja tan lejos como se pueda imaginar.

LA FUERZA DE LO COLECTIVO QUE SE VUELVE ABRAZO

MÚSICOS: Gloria de la Vega; Jorge Luis Gigena; Fernando Sebastián Álamo; Facundo Flores; Raúl Alejandro Carrizo; Julieta Agostina Gigena; Rodolfo Moya. BAILARINES: Brisa Mariana Montoya; María Victoria Villegas Alamo; María José Reynoso; Zahira Sol Lucero; Dina Elba Belén Luna; Romina Gisele Quiroga; Xenia Magali Narváez; Pamela Gisel Quintero; Irma Graciela Villafañe; Belén de los Ángeles Gamboa; Flavia Abigail Díaz; Catalina Romero; Priscila Carolina Moyano; Jonatan Facundo Vidable; Luciano Gabriel Britos; Juan Luis Miguel; Dante Matías Herrera; Carlos Campos Carrizo.

ENCARGADOS DE DANZA: Carlos Campos Carrizo y “Popi” Villafañe.

ASISTENTES: Juan Ramón Gonzalez; Milagros Gigena; Josefina Micaela Gigena; Jonhatan Emmanuel Carrizo.

MANAGER: Marcos Pratto.