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1591 Cultura + Espectáculos PARTE DE LA HISTORIA

Huella chileciteña para el mundo

Santiago Dario Felipe Bazán, el hombre que dejó su brillante trayectoria como muestra del valor humano que la Perla del Oeste legó al mundo. En 1993 recibió la Cruz del Mérito, distinción de la Fundación Albert Einstein, dejando sus antecedentes en el primer Banco de Datos de Inteligencia Mundial. Un riojano que marco la diferencia.
Sara González

Por Sara González

La calle silenciosa invitaba a la charla que estaba por suceder. El otoño ya pintaba de colores dorados los arboles de la cuadra, una señorial casona de dos pisos se alza sobre la calle Julián Amatte. Una brisa suave y fresca le da movimientos de danza sin escenario al jardín que espera volver a la magia de sus años pasados. Una mujer esbelta y aun hermosa a pesar del paso del tiempo en su rostro, sonríe al abrir la puerta. Tiene un aire sofisticado, distinguida y fina. Nació en la isla Martín García y llegó a Chilecito cuando aún era pequeña.

El destino cruzó su camino con el de un hombre absolutamente increíble, capaz de revolucionar las montañas de Chilecito, dejando su impronta imborrable. Santiago Bazán dejó una huella importante e ineludible de contar, recordar y homenajear en La Rioja. A través de su lugar en la Perla del Oeste, llegó a tocar las esferas más altas y encumbradas del mundo. Contaba con su primer década infantil cuando Nelly quedó subyugada por la presencia de Santiago Bazán, quien en aquel entonces ya ejercía su profesión como médico en Chilecito.

Tras un breve accidente ofreció su ayuda amablemente al padre de Nelly, los separaban tres décadas de diferencia… en ese momento fue todo. Hasta que el destino tejió sus redes, unió el hilo rojo y volvieron a encontrarse, cuando bella, moza y joven ensamblósu vida a la de él, tuvieron dos hijos. Quienes han tenido el privilegio de conocer al Dr. Bazán personalmente manifiestan una gran admiración, reverencia ante su recuerdo, respeto a su legado cultural, intelectual, y a su profunda huella en la medicina Riojana.

Santiago era un hombre reservado, cauteloso, serio, intrépido, convencido de sus propósitos, comprometido con su vocación, honesto, leal a sus seres amados. Un hombre de pocas palabras pero de muchas y múltiples acciones. Reacio al reconocimiento público, cuidadoso en su exposición social. Meticuloso, estructurado, curioso, científico brillante, filantrópico y amante de las letras.

Se graduó el 19 de abril de 1937 como Doctor en Medicina, de la Universidad Nacional de Buenos Aires. A los pocos meses con apenas 24 años obtiene por concurso una importante beca otorgada por la Universidad de Oxford. La beca “Príncipe de Gales”, donde realizó estudios en Farmacología. El Dr. Bazán se perfilaba con un futuro prometedor acompañado con un intelecto de genio, al año siguiente de terminar la Beca, ya se encontraba como alumno del Dr. Bernardo Houssay participando de un congreso en Zúrich.

Continúo su capacitación profesional, con la especialidad de Traumatología, en Viena, pasando por París, donde se capacitó en Cirugía Infantil. Sus viajes por el viejo continente tenían como objetivo seguir creciendo en el ámbito de la medicina. De la mano de una eminencia como lo era el Prof. Dr. Káiser, en Berlín, realizó el curso de Cirugía General, donde se vio utilizar por primera vez el Evipan Sódico endovenoso.

El gran profesional Dr. Bazán, tenía a sus pies un sinfín de propuestas laborales, en distinguidos espacios internacionales en cualquier país del mundo, y con posibilidades de crecimiento ilimitado, el cielo era apenas el firmamento que ya visionaba a conquistar. Sin embargo eligió con el corazón y entrega absoluta a su rincón en el mundo, así volvió a Chilecito, convirtiéndose en el primer cirujano del hospital chileciteño. Un doctor con valores éticos, morales, de un desempeño impecable y destacado. Incursionó además en la Medicina Forense, demostrando su alta competencia y completitud. Sin embargo no solo se conformaba con ser un profesional de la salud, exploraba su intelecto ávidamente, en esos espacios casi inexistentes de su vida.

Fue un hombre de mente sagaz e inquieto, sus intereses iban más allá de lo que cualquier persona corriente pueda manifestar, él se adentraba en ellos, los hacia propios de manera tangible, los desarrollaba y disfrutaba de cada espacio elegido. Fue poliglota, estudió dominando los idiomas inglés y alemán. Ávido lector, amaba la literatura, además fue periodista y como tal, redactor y tipógrafo del diario quincenal “El Pucará”.

Tenía especial disfrute en la música, una anécdota lo demuestra claramente. Se encontraba en Italia, donde visitaba apasionadamente todos los lugares históricos y culturales. En Milán alteró su itinerario interrumpiendo su trayecto, ya que se presentaba el Conjunto Orquestal de Bayreuth ejecutando las óperas de Wagner, lo que fue imposible para él perderse.

La fotografía era otro interés que le causaba fascinación, junto con las exploraciones naturales en la montaña y la minería, recorrió las minas de Cerro Negro y otras con casi todos los especialistas y Geólogos que las visitaron, desde ingleses hasta canadienses, a ello se debe su perfecto conocimiento de las montañas y su amor por ellas. Recorrió todo el país, desde La Quiaca a Rio Gallegos. Su vida estuvo llena de historias cautivantes, experiencias increíbles, anécdotas que involucraban todas las emociones, postales que guardaba en su alma a través de la retina, aventuras, intervenciones sociales, culturales, gestiones políticas a las cuales en su mayoría terminaba renunciando. Era evidente su interés más allá de todo, se enfocaba en cuidar y potenciar la sociedad que conformó en aquellos años. Trabajó incansablemente por un Chilecito que crecía con gran auge.

Tuvo una presencia responsable y transparente en la gestión política, desempeñándose en varias áreas, ya que su impresionante capacidad intelectual le daba respaldo en los espacios requeridos. Fue Asesor del Ministerio de Comercio Exterior de la Nación. Representante del Ministerio de Comercio Exterior ante la comisión asesora de la Industria Minera. Gerente de Minería Del Instituto Argentino de promoción del Intercambio.

Además se le otorgó la candidatura a la Gobernación de la provincia De La Rioja, honor que rechazo cordialmente. Dentro de su amado Chilecito fue férreo defensor y precusor de la preservación del Cable Carril, siendo socio fundador del Museo Cable Carril, intervino incontables veces, evitando la destrucción del mismo. El Museo lleva su nombre en homenaje a su custodio anónimo. También fue socio fundador del Colegio Médico de Chilecito. Socio Fundador del Museo San Francisco (cerrado en la actualidad). Socio Fundador de la Escuela Nacional Polivalente de Arte.

En 1978 “WHO´S WHO IN THE WORLD” lo reconoce y distingue por su enorme aporte a la humanidad, incluyendo su biografía en su 4ta. Edición, marcando un antes y un después en la historia Riojana y Argentina. Más tarde en 1980 “MEN AND WOMEN OF DISTINCTIONT”, biografías internacionales del centro Cambridge (Inglaterra) le dedica un espacio distinguiéndolo como una figura destacada en el mundo. La elevada vara que marco el Dr. Bazán lo dejó sublimado en la historia, como uno de los grandes hombres que nacieron en la Perla del Oeste.

Una vida prolífera de compromiso profesional, humano, científico, que no pasó desapercibido para el mundo. Y su reconocimiento quedó en la historia, es preciso sostener en el tiempo la memoria y el homenaje para tamaña figura. La identidad riojana tiene personalidades de un valor ineludible, con huellas indelebles. Preservar la memoria de ellos es un deber cultural que no permite el olvido.

La Asociación Argentina de Cirugía lo designó Miembro Emérito, bajo un emblemático acto que se realizó el 8 de octubre de 1993. En 1994 la Municipalidad del Departamento de Chilecito lo nombra Ciudadano Ilustre. Santiago Bazán nació el 20 de octubre de 1913, el Día del Pediatra en Argentina. Un guiño del destino, una varita que designó un camino construido bajo la responsabilidad del compromiso académico y el perfeccionamiento profesional continuo.

PERLITA HISTORICA

Una peculiar anécdota sucedió en España, anexado al contrabando de cuatro libros, ingresaba el Dr. Bazán al país cuando la guerra civil terminaba. El mismísimo Duque de Alba firmó su autorización para ingresar, con el mismo extendió un salvoconducto que permitía recorrer cuatro localidades. El doctor arriesgó su libertad pasando en su maleta cuatro libros, 400 micro-fotografías de cortes cerebrales neurológicos, retiradas de la casa del Profesor Pío del Río Ortega para llevárselos a Londres.

Los mismos materiales eran indispensables para ser traducidos y avanzar así en los estudios de la medicina. El riesgo y la adrenalina que dicha anécdota tuvo para el doctor lo llevó a guardarlo entre sus recuerdos. La riqueza de una vida inolvidable es el legado con derecho a réplica humana. En la actualidad el mundo necesita más personas comprometidas con sus ideales.

Una calle de Chilecito reza Dr. Santiago Bazán, tanta vida con aportes valiosos para el mundo, toma un significado diferente, al saber a ciencia cierta que el mundo reconoció al brillante genio de la Medicina riojana y le dio el merecido lugar, respeto y homenaje en vida.

PARTE DE LA HISTORIA

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