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The Cult: hard rock clásico y arrollador

A lo largo de su extensa carrera, The Cult se ha convertido en una de las bandas mas importantes de Inglaterra y del hard rock global y parte de esa consolidación empezó con el lanzamiento de Electric.
Sebastián Bertolosso

Por Sebastián Bertolosso

A lo largo de su extensa carrera, The Cult se ha convertido en una de las bandas mas importantes de Inglaterra y del hard rock global y parte de esa consolidación empezó con el lanzamiento de Electric, un disco clave que significó un antes y después en la carrera de la banda. Una obra cumbre de ese viejo y querido hard rock granítico y demoledor pero sobretodo dotado de grandes canciones hoy ya convertidos en verdaderos clásicos. Decimos que fue un disco bisagra para The Cult, ya que para el cantante Ian Astbury y el guitarrista Billy Duffy que han sido los ejes del proyecto que trascendieron todas sus formaciones, los inicios no fueron para nada fáciles. Luego de sus primeros álbumes como Dreamtime de 1984 y sobre todo ese gran disco de culto que fue Love de 1985, la valoración de la critica y el éxito les empezaba a sonreír, ya que era un excelente disco con una fuerte impronta de rock gótico y post-punk tan característicos de principios de los ochenta, y asimismo habían empezado a ganar una nueva legión de fans como así también un fuerte incremento en las ventas. Parte de eso se daba, porque no era un disco de canciones frías y lúgubres como las de sus colegas sino que Love tenía un sonido e identidad propia ya fusionaban esos géneros con elementos del rock clásico muy marcado sobretodo en el sonido de guitarras que convirtieron a sus singles Rain o She Sells Sanctuary en verdaderos clásicos del rock de todos los tiempos.

The Cult - Wild Flower ☠????☠

A medida que fue transcurriendo las gira de Love, las canciones fueron ganando en fuerza, distorsión y electricidad, sonando aún mucho más enérgicas que en el disco, lo cual fue formando la piedra basal del nuevo sonido de los Cult que como era de esperar se vería reflejado en su nuevo trabajo en el estudio. Para 1986 y aún con el añorado bajista Jamie Stewart como miembro fundamental del grupo, registran varios de esos nuevos en vivo en programas de radio o sesiones de estudio como un primer acercamiento a lo que sería el disco definitivo, donde ya se vislumbra claramente la nueva identidad sonora que sigue teniendo elementos del rock gótico y psicodélico pero ahora fusionados a un potente hard rockpara lo cual siguen girando y puliendo las canciones, para meterse en el estudio nuevamente con Steve Brown, el productor de Love. La idea original era que el nuevo disco se titulase Peace, y que si bien en ese momento tenían unas cuantas canciones buenas, notaban que algo faltaba y que no fluía como un digno sucesor de Love, para ello y luego analizar el rumbo a seguir, se contactan con contactan con Rick Rubin, el legendario productor del rock, que por ese entonces estaba en sus inicios pero ganando fama a pasos agigantados tras sus colaboraciones con Slayer y diversos proyectos incipientes del hip hop como los Beastie Boys y su gran Licensed to ill, que era un disco que el propio Astbury adoraba. En este nuevo contexto, Rubin les plantea la disyuntiva central, si lo que quieren es hacer un álbum de rock crudo y directo hay que poner foco en eso, trabajar duro en el estudio y comienzan a tomar como seriamente sus modelos a seguir que no era ni mas ni menos que la vieja escuela de rock, es decir: los riffs incendiarios de Led Zeppelin, la simple pero contundente potencia de AC/DC, y la actitud y el desparpajo de los Rolling Stones pero siempre manteniendo su identidad y sonido propio.

Una vez definida la dirección del nuevo disco, lo siguiente fue encontrar un título que fuera claro y contundente y Electric definitivamente lo era. Este nuevo disco no solo trajo el cambio en el sonido sino en su postura, vestimentas y forma de vivir, de ahí que sea un momento fundamental en la carrera de The Cult, los trajes pomposos, el maquillaje y el amaneramiento escénico de otrora mutaban ahora hacia una estética y actitud rockera por excelencia.

Este nuevo sonido ahora se basa en la potencia y distorsión, gracias por cierto al talento del virtuoso guitarrista Billy Duffy que a base de riffs y solos incendiarios se roba el show junto a Ian Astbury quien sin dudas se consolida como uno de los mejores cantantes de su generación, siempre marcado como digno heredero de Jim Morrison con esa voz inconfundible, ademas de un asombroso parecido físico con otra leyenda como Steven Tyler. De este modo el sonido general que consigue Rick Rubin es seco y duro, con bajo y batería bien marcados conformando una base potente y granítica que conforman un acompañamiento ideal a los dos protagonistas principales ya mencionados, y que ademas manifiestan una declaración de principios alejándose totalmente de ese sonido glam o soft metal de la época marcado por el uso y abuso de sintetizadores, baterías y guitarras con eco.

Gran parte del logro de Electric es su identidad sonora propia, si bien hay influencias de bandas clásicas, todo el disco suena fresco y original, rebosante de personalidad, actitud y carisma y no había nadie que sonora así por ese entonces. Así como antes los podían haber acusado de seguir las modas y estilos a principios de los ochenta, ahora eran ellos quienes imponían la tendencia y llegaban justo antes de la explosión hard de finales de esa década, ni mas ni menos que con un disco de rock clásico.

Es uno de esos discos que apenas lo empezas a escuchar te cambia el humor para bien, ese inicio con Wild flower hace que sientas que ese día no te lo puede estropear nada ni nadie. Y si bien la influencia de Zeppelin queda plasmada en los riffs de Memphis Hip Shake o King Contrary Man, The Cult la adapta a su sonido dando un resultado contundente, como también ocurre en el genial cover de Born to be Wild de Stephen Wolf que la hacen propia y la toman como declaración de principios donde Billy Duffy literalmente vuela en la guitarra, o en la contundente Peace Dog donde el desparpajo de la banda es total. Y qué decir de sus tres singles, sin lugar a dudas de lo mejor que han editado en su carrera como lo son Wild flower y Lil´devil que si bien tienen riffs sencillos son efectivos como un cross al mentón, y Love Removal Machine esa genialidad que tiene ese guiño a los Stones de Star Me Up y que va mutando luego hacia un final frenético en donde la banda queda absolutamente en llamas.

Además de toda la explosión y éxito que cosecharon por esos años encandilando a todas las tribus rockeras por igual, posicionándose como “la banda a ver en vivo” a ver lo cual era algo extraño en ese entonces ya que había un encasillamiento muy marcado en el público en general, empezarían a delinear lo que sería ese otro gran álbum que editarían que no era ni mas ni menos que el también imprescindible Sonic Temple, con el que consiguieron la conquista de América…pero esa es otra historia que ahondaremos en otra ocasión, por lo pronto les recomiendo enfáticamente la escucha de este tremendo disco de hard rock clásico, de ser posible a todo volumen.

Hasta la próxima.

Artista: THE CULT

Álbum: ELECTRIC

Fecha de Lanzamiento: 6 DE ABRIL DE 1987

Duración: 38:51 MIN.

Producción: RICK RUBIN

Sello discográfico: BEGGARS BANQUET RECORDS LTD.

@sebabertolosso
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