CONÓCETE A TI MISMO
Elegir una carrera u ocupación; son elecciones trascendentes porque ponen en juego todo nuestro ser y futuro ser, ya que es necesario responder a la pregunta ¿Qué quiero hacer? Pregunta que está íntimamente vinculada a otra pregunta ¿Qué quiero ser? ya que nos vamos definiendo en el hacer.
Es cierto que somos lo que pensamos, lo que decimos, lo que sentimos, pero también somos lo que hacemos, porque nuestro ser encuentra la coherencia en el hacer.
Responder a estas preguntas requieren de nosotros conocer qué nos gusta o disgusta, qué cosas hacemos con facilidad y qué cosas nos cuestan mucho, cuáles son nuestras fortalezas y cuáles nuestras debilidades.
Conocerse así mismo implica mirar hacia nuestro interior, escuchar nuestra voz interior. Y esto resulta de gran desafío en un mundo lleno de voces y ruidos, pero también de silencios abrumadores, lleno de modas, imposiciones y pretensiones. Puede resultar un lugar incómodo cuando encontramos en nosotros cosas que no nos gustan tanto, pero significará un camino de aceptación que nos permitirá encontrarnos con la autenticidad del ser, siempre en construcción y en vías de plenitud.
En orientación vocacional trabajamos con los factores internos que se ponen en juego en el proceso tales como: las identificaciones, donde cobran mayor relevancia, la identificación con las figuras parentales, con docentes o profesionales significativos, con el grupo de pares, entre otros.
La autopercepción, es otro factor de gran importancia. Rosa Guitard Aced (1999) entiende por autopercepción “aquello que pensamos que somos, es la representación de nosotros mismos y que incluye la opinión sobre cómo es uno (aspectos corporales de apariencias y habilidades físicas, psicológicas, afectivas, sociales, etc.), sobre la propia conducta, o sobre las posibilidades y capacidades personales (en el presente y en el futuro). Es luridimensional, en el sentido que abarca los diferentes aspectos personales, es la representación subjetiva de uno mismo que puede o no corresponder con la realidad”
La autopercepción o autoconcepto, según la autora, está íntimamente relacionado con el concepto de autoestima, aunque son diferentes, ya que la autoestima es la valoración de las cualidades personales que lleva a quererse y autocomportarse de manera positiva o negativa, es la actitud hacia si mismo que más se relaciona con la afectividad personal.
Por consiguiente, si la autopercepción es la representación que tenemos de nosotros mismos, y ésta es positiva o negativa, llevará a tener una autoestima alta o baja respectivamente; siendo la autoestima alta según James (1890) favorecedora del éxito siempre y cuando, la autopercepción y aspiraciones, no estén alejadas de la realidad.
CONOCE EL CONTEXTO DONDE VIVES
Para elegir una carrera también resulta necesario conocer qué características tiene el contexto donde vivo, qué posibilidades y qué limitaciones me ofrece, con qué obstáculos me enfrento, pero también con qué puentes, qué otras posibilidades contextuales tengo.
Conocer el contexto requiere mirar lo que nos rodea, los recursos con los que contamos y los alcances que podemos tener.
Será de gran importancia entonces conocer la oferta educativa de la provincia, del país y si está en nuestras posibilidades conocer la oferta de otros países (universidades, institutos educativos, profesorados, institutos de educación no formal, etc.)
Para enfrentar este desafío, en la orientación vocacional se torna necesario considerar ciertos aspectos:
- Reflexionar sobre sí mismo, sobre las propias aptitudes, preferencias, valores. Clarificar la identidad ¿quién soy? y la imagen de si proyectada al futuro ¿quién quiero ser?
- Identificar los enemigos, tantos internos (miedos, vicios, bloqueos emocionales, otros) como externos (gente tóxica, ambientes tensos, etc.)
- Reflexionar sobre los objetivos educacionales y el planteamiento de estrategias para lograrlos.
- Buscar información sobre la educación, es decir la oferta educativa conocer las instituciones educativas y las carreras que ofrecen, conocer el plan de estudio, es decir las materias que lo conforman, el perfil de egresado y el perfil profesional, la relación con diferentes profesiones a futuro.
- Plantearse las posibilidades en el financiamiento de los proyectos personales.
LA AUTORA
LICENCIADA Y PROFESORA EN PSICOPEDAGOGÍA. DOCENTE EN LA UNLAR, ISFD “ALBINO SÁNCHEZ BARROS”. INTEGRANTE DEL EQUIPO DE ORIENTACIÓN ESCOLAR DE UN COLEGIO DE GESTIÓN PRIVADA DE LA PROVINCIA. REALIZA ORIENTACIÓN VOCACIONAL, ASESORAMIENTO INSTITUCIONAL Y EN TESIS, EN EL ÁMBITO PRIVADO PARTICULAR.
¡Socorro! Termina la secundaria y no sé qué carrera elegir
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