Un nuevo aniversario de la ciudad de La Rioja cabe recordar a sus fundadores y las circunstancias de aquellos desafíos, y además un viejo asunto historiográfico local, si la ciudad de Todos los Santos de la Nueva Rioja, el 20 de mayo de 1591, fue fundada en el lugar equivocado. Extrañamente es la única ciudad que permaneció en el mismo lugar a pesar de múltiples problemas y amenazas.
Esta historia forma parte de la gran historia de la conquista y la colonización del continente americano, cuyas disputas y debates todavía están a la orden del día, tal como lo certifica el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, que insiste en solicitarle a España que pida perdón por la conquista de América.
¿La Rioja se fundó por equivocación? Todo parece indicar que no; que los españoles sabían lo que querían y fundaron de acuerdo a los criterios aconsejados a tal fin. No fue una improvisación. Había una cuestión estratégica, geopolítica, las distancias eran enormes y las comunicaciones muy lentas y difíciles. Los aborígenes asaltaban e incendiaban poblaciones, entonces había que refundar…
El virrey de Lima, Francisco de Toledo, para evitar tanta desconexión entre Lima y las gobernaciones del sur, Tucumán, Chile y Paraguay, propone la fundación de Salta y la refundación de Londres, en el territorio que después sería Catamarca. Juan Ramírez de Velasco no repobló Londres sino que fundó La Rioja porque tuvo noticias del oro y de Famatina, creían que era otro Potosí. Y la expedición fundadora liderada por Velasco fue la más importante de todas las del noroeste: setenta españoles bien pertrechados, ochocientos caballos, catorce carretas, ciento veinte bueyes y cuatro mil cabezas de ganado menor, como detalló el escrupuloso escribano Luis de Hoyos.
El gran olvidado, Juan Ramírez de Velasco
Juan Ramírez de Velasco, cuyo nombre completo era Juan Ramírez de la Piscina de Velasco y Ábalos, nació en la provincia de La Rioja, en Estollo, en el valle del río Cárdenas, cerca de Logroño en el año1539. Pertenecía a una distinguida familia española, a la que el rey Felipe II siempre tenía en cuenta a la hora de nombrar administradores en las colonias. Se había incorporado al ejército español con sólo 16 años de edad y tuvo una destacada carrera militar: peleó en Italia, formó parte de la conquista de Portugal, y viajó muchas veces a las Indias. Con esos antecedentes, el Rey lo nombró gobernador del Tucumán, cuya sede era la ciudad de Santiago del Estero, en 1584. Tenía 45 años de edad.
Respecto a los aborígenes dio batalla para proteger y salvar las ciudades, Salta por ejemplo, pero a la vez negociaba soluciones pacíficas. No era un conquistador salvaje. Era recto también en cuestiones religiosas. Por eso, durante toda su gobernación tuvo conflictos con el primer obispo de Tucumán, Francisco de Victoria, un personaje muy singular, dedicado al comercio, al contrabando y al tráfico de esclavos, principalmente con Brasil. Este obispo tenía en encomienda alrededor de 20.000 indios. Ramírez de Velasco lo combatió, lo denunció al Rey; y el obispo respondió con difamaciones, rumores malintencionados y lo excomulgó en cuatro oportunidades…
Ramírez de Velasco, desde luego, trabajó para la consolidación del dominio español, que era el cometido general de los conquistadores. Tenía una visión muy clara. Las fundaciones que proyectaba, que eran varias, tenían como objetivo agrandar el Tucumán para integran mejor todo el inmenso territorio, Charcas, Paraguay, Chile. Por eso le pidió al Rey que incorporara la recién fundada Buenos Aires al Tucumán. Fue muy explícito con la importancia del puerto de Buenos Aires.
Ramírez de Velasco muere en Santa Fe, en el primer emplazamiento de esta ciudad, en febrero de 1597, con 58 años de edad. Estaba de paso, se dirigía a Buenos Aires, desde Charcas. Recordemos que en 1594 había sido designado gobernador del Paraguay, entonces llamado Nueva Andalucía del Río de la Plata.
Tarea fundacional de Velasco
Algunas ciudades pudo fundar y otras no. Fracasa en su intento de fundar una ciudad en el Chaco Gualumba que iba a llamarse Nueva Logroño y otra en el río Quinto, al sur de Córdoba, Nueva Sevilla. Después funda la ciudad de Todos los Santos de la Nueva Rioja, el 20 de mayo de 1591. El año siguiente emprende la fundación de la Villa de Nueva Madrid, en el actual departamento Metán, Salta, más tarde abandonada y luego envía al capitán Francisco de Argañarás y Murguía a fundar Jujuy por tercera vez, la tercera y definitiva fundación hasta el día de hoy. Fue el 19 de abril de 1593, en el lugar donde está emplazada actualmente la Plaza Belgrano, siendo un lunes de Pascua de Resurrección y bajo la invocación del Salvador.
Como bien señalaron algunos historiadores, el mandato de Velasco marcó el comienzo del firme control de España en la zona del Tucumán, y estimuló la introducción de ganado, creó estancias, pacificó a los aborígenes y alentó el establecimiento de familias hispanas en la región.
Fundación de la Ciudad de Todos los Santos de la Nueva Rioja
Ante la falta de ayuda del rey y del virrey de Lima, Ramírez de Velasco acordó con otro gran olvidado de nuestra historia, el empresario y nuevo Maestre de campo del Tucumán, capitán Blas Ponce, unacaudalado vecino de Santiago, al decir de Dardo de la Vega Díaz, quien se convierte en el financista de la expedición. Velasco y Ponce firman unas capitulaciones que merecen el repudio de de la Vega Díaz, ya que las considera leoninas y en consecuencia dice: La expedición conquistadora y pacificadora se convirtió en simple empresa de colonización particular de Blas Ponce. Se trata de una simplificación de Dardo de la Vega Díaz.
Los que comparten el criterio de Dardo de la Vega Díaz creen que las prerrogativas de Ponce eran exageradas. El otro criterio dice que fue una empresa arriesgada, al fin y al cabo se venía de la destrucción de Londres y fundar otra ciudad, es decir armar un fuerte precario y algunas casuchas con la mirada absorta de los aborígenes que no sabían a qué atenerse, era simplemente una quijotada entre la gran quijotada que fue poblar y colonizar un continente tan desmesurado…
La Rioja, única ciudad fundada por estos lares
Es muy frecuente el error de referirse a la fundación de tal o cual departamento de la provincia. En realidad la única ciudad que se fundó en esta zona fue la de Todos los Santos de la Nueva Rioja, que implicaba toda una cuestión jurídica, formal y simbólica. Ramírez de Velasco y sus hombres llegaron desvelados el 10 de mayo al lugar donde habrían ciudad. Habían caminado toda la noche, como dejó constancia el escribano don Luis de Hoyos, y sin pensar en irse a dormir, capturaron a unos treinta aborígenes, entre grandes y chicos, visto lo cual otros caciques de los alrededores se presentaron en buenos términos. Los españoles, para engañarlos mejor, les devolvieron las cosas que les habían quitado.
Después los aborígenes fueron testigos de la burocracia de la fundación: el 20 de mayo Ramírez de Velasco tomó el estandarte real y se lo dio al Alférez General, que no por casualidad era su hijo de idéntico nombre; luego subió a su caballo y seguido por sus hombres también a caballo dio una vuelta al sitio que sería la actual plaza 25 de mayo, se detuvo en el centro, se apeó, recuperó el estandarte real y agitándolo gritó ¡España! ¡España! ¡España! y luego en nombre del Rey don Felipe II hincó y mando hincar un árbol de madera por rollo y picota y este es el árbol de justicia civil y criminal donde será ejecutada la real justicia… y después tomó unas ramas a espadazos limpios diciendo que en nombre de su Majestad tomaba posesión de esta ciudad y la llamo ciudad de todos los santos de la nueva rioxa.
La herencia española
La Rioja es una de las pocas ciudades que conservó el sitio a través del tiempo. Félix Luna decía que era un milagro que La Rioja haya sobrevivido en el mismo lugar donde fue fundada. La herencia española es mucho mayor de lo que estamos dispuestos a admitir, tanto en lo positivo como en lo negativo. Nos dejaron todo y se llevaron todo, dice Neruda, nos dejaron las palabras. También nos dejaron la traza de la ciudad, la religión, la historia, la mixtura, la envidia, la abnegación, la poesía, el estoicismo, el disparate, el espíritu pleitero, ciertas filosofías de vida…
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