La temporada en la máxima categoría, sin dudas, que viene siendo muy importante para el conjunto riojano, ya que en 19 partidos culminó con un récord de 14 victorias y 5 derrotas, de la mano de Sebastián González como el DT, ubicándose en la segunda posición de la tabla.
El trabajo institucional realizado por el Eterno fue la clave para llegar a este gran presente que está viviendo, recordemos además que su plantel femenino viene de disputar el cuadrangular final del Torneo Apertura culminando terceras, que la Liga de Desarrollo se encuentra en los primeros puestos de clasificación y el 3x3 (actuales campeones) están primeros en la tabla de posiciones.
Riachuelo comenzó con este proceso en julio del reciente 2024, tan solo algunas semanas luego de haber finalizado la fase regular pusieron manos a la obra y con un proyecto comandado por Sebastián González como entrenador jefe y a cargo arrancaron la llamada “postemporada”, dirigida a los juveniles del club que integraban el plantel de Liga Nacional y Liga de Desarrollo, volviendo a sus raíces en Av. Joaquín V. González y Pasaje Mamerto,entrenando a tres estímulos: Gimnasio, carta de tiro y fundamentos (defensivos - ofensivos).
Acompañado de sus asistentes, PF y Kine, Sebastián comenzó a trabajar en el club coordinando los trabajos que los juveniles realizaban y junto a los dirigentes en el armado del plantel para la temporada 2024/25. Finalizada la postemporada llegó el mes de septiembre, que fue clave en todo este proceso iniciado, el lunes 2 arrancó el camino con el primer día en el que todos los compañeros se reencontraron. En un mes con amistosos y entrenamientos, el equipo comenzó a encontrarse en un grupo humano muy sano, que dentro de la cancha lo darían todo el uno por el otro.
Con la capitanía de Diego Figueredo -en su vuelta a la Liga Nacional después de algunas temporadas jugando en México, Brasil, y recientemente en Colombia- Riachuelo encontraría un liderazgo en el que el equipo se apoya en los momentos difíciles del juego, ya sea con las conexiones con sus compañeros -con el que más se entendió es con Reginald Becton-, impulsando al equipo para levantarlos o encendiendo con su tiro de tres puntos.
Fue uno de los primeros en expresar que, si bien el presente que está teniendo el club lo disfrutan y es algo por lo que trabajan día a día, no se imaginaban estar viviendo este presente y no eran los objetivos planteados, pero que si van paso a paso por este camino.
Sebastián, quien fue una de las claves para el armado de este Riachuelo, junto a los dirigentes buscando un equipo que enamore al público Riojano y busque contagiar en los partidos, expresó al respecto: “Nosotros tratamos de construir partido a partido, buscando tener la identidad de empezar los partidos de atrás para delante, de no dar nada por perdido, de realizar el máximo esfuerzo, y tener desafíos individuales que sumen a lo colectivo, y jugar en dinámicas”.
Además agregó que este equipo tiene un plus: “Es un equipo que tiene bastante entrega y que disfruta jugar juntos, ese es un plus que tenemos y que tratamos de mejorar día a día”.
El equipo de la Provincia, como lo tienen identificado los Riojanos y Riojanas, ya disputó sus primeros 20 partidos en esta temporada, repartidos en 10 de local y 10 de visitante, en donde hizo de su casa -El mítico Estadio Superdomo- una verdadera FORTALEZA -como lo llaman a su primer sede en Joaquín V. González y Pje Mamerto- obteniendo 8 victorias y tan solo 2 derrotas (Boca y Platense).
De visitante una garantía, dió el golpe ante Obras y San Lorenzo en la primera gira. En un total de 10 partidos fuera de casa, perdió solo en cuatro oportunidades (Gimnasia - Oberá - Quimsa e Independiente Oliva).
Su récord actual es 14-6, ubicándose en la segunda posición de la tabla y con clasificación al Súper 4, sin dudas el gran presente es el mejor arranque de un equipo Riojano en la élite del básquet nacional.
Dándole inclusive la posibilidad al interior de la Provincia de poder disfrutar de eventos de este calibre, recordemos que en el duelo ante La Unión de Formosa cambiaron su localía al “Templo Celeste”, histórico estadio del Club Atlético Chilecito, brindándole de esta manera un partido de Liga de Desarrollo, Liga Femenina y Liga Nacional a una Ciudad totalmente identificada con este hermoso deporte cómo lo es la Ciudad de Chilecito, en donde salieron varios basquetbolistas destacados, y también al público Riojano de ciudades vecinos. Jugando a estadio lleno.
Otro sueño concretado por parte de la dirigencia eterna. Este 3 y 4 de marzo, La Rioja vivirá nuevamente un sueño. Toda la provincia irá en busca de dar un paso más en esta historia que comenzó a escribirse desde hace tiempo, en esta ocasión por primera vez en la Copa Súper 20, de la mano de “Él Eterno”, cómo hace 30 años todos se unían para ver los partidos del “Torito de Maradero” -Andino Sporting Club- del Huevo Sanchez y Manu Ginobili. Porque el básquet nacional volvió a La Rioja, pero su esencia y la pasión con la que la gente lo vive siempre.
Comentarios