Ella está en Kiev desde hace un mes aproximadamente donde comparte equipo de trabajo con camarógrafo y guía ucranianos.
Al darse a conocer las normativas que exigen a todo hombre ucraniano de entre 18 a 60 años a quedarse a defender al país, el panorama cambió completamente.
El guía de Sol, con el que se conocen hace poco más de un mes y con el que estuvo compartiendo su día a día en este viaje a Ucrania, le hizo un desesperado pedido y la joven lo relató en una entrevista.
"Es muy duro que alguien venga y te diga: por favor llevate a mi hija y hazte cargo de ella, que no le falte nada", la realidad pura que están viviendo muchas familias en ese país.
En la entrevista le preguntaron qué iba a hacer con la niña si se la llevaría y la argentina respondió: "Claro, es mi familia ahora, es mi hermana".
Sol está llegando a la frontera de Ucrania con Polonia por donde dejará el país junto a su equipo y la joven ucraniana.
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