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1591 Cultura + Espectáculos ENTREVISTA

Mario González: herencia de tradición y legado adquirido

La segunda generación va tomando la posta de una herencia que tiene compromiso con la tierra, su fruto y una tradición de cuna.
Sara González

Por Sara González

Mario González nació en el seno de una familia tradicional de Chilecito, es el tercer hijo de Mario González y Antonia Martínez. Su vida estuvo siempre teñida de simpáticas anécdotas, con el ejemplo de un padre que estuvo bajo la entrega absoluta al trabajo en pos del crecimiento agro y vitivinícola. Él siempre tuvo la inquietud de marcar la diferencia, esa fue la premisa de vida en la cual creció. Aprendió a manejar un tractor cuando los niños todavía exploraban los autitos, quedó cautivo de los procesos productivos y sin perder los ideales construyó su propio camino.

Su infancia transcurrió en la finca familiar situada en San Miguel, un pintoresco distrito de Chilecito, lugar donde vivió hasta los 12 años y desde donde salía a diario para cumplir con sus estudios. Los genes de Mario siempre estuvieron profundamente ligados al trabajo agropecuario, vitivinícola, e incluso desde su inclinación e impulso social para perfilarse como líder. Dentro de estos cánones no fue de extrañar que se adentrara a los 13 años en el movimiento Juvenil agrario, en el año 1992, cuando se forma el centro.

Mario González
Mario González

“Fui de los niños más pequeños en esa generación, empiezo a participar de las primeras capacitaciones. Los chicos me llevaban uno 8 a 9 años, rescato de ese momento la gran cantidad de capacitaciones que recibíamos, viajábamos a Mendoza, a Rosario. Tuve las oportunidades al igual que todos los que estábamos en ese momento, de apropiarnos de los conocimientos. Además en aquel entonces mi padre y mi Tío Ambrosio formaron la finca juntos, y toda la familia trabajaba en ella, cosechábamos sin personal extra. Siempre lo manejamos nosotros, eso me fue formando desde el trabajo propio y fundamental que tiene la tierra. Vimos nacer y crecer la finca, en todos los detalles, disfruté mucho esa etapa de mi vida, me fui enamorando del trabajo que significa la Finca”.

Finalmente llegó el momento de la decisión para sus estudios universitarios, incluso en los últimos meses del colegio secundario se encontraba indeciso. “No tenía claro que estudiaría, Ingeniería Agrónoma o Ingeniería Industrial, me encontraba en dudas, tuve la necesidad de salir de Chilecito, quise instalarme en Córdoba, donde mis abuelos maternos vivían, lo cual me brindaba un respaldo familiar, y tras algunas charlas decidí estudiar Ingeniería Agrónoma”.

Sus desafíos como estudiante fueron probándole su capacidad de ingenio comercial y emprendedor, todo lo que estaba implícito en su familia. “En el año 2001 cuando el país estaba en una crisis fuerte, mi familia productora tenía aceitunas en el campo, y encontré una veta para solventar mis propios gastos. Comienzo vendiendo pequeños tachos de aceitunas a pizzerías en Córdoba. Más adelante se transformaron en envases más grandes, y el resultado fue una distribución mayor, y amplié mi emprendimiento vendiendo pasas de uvas. Así me comencé a vincular con el comercio, que en inicio lo compartía con mi hermano, y más tarde me dediqué a mi propio negocio”.

¿CUÁLES ERAN TUS EXPECTATIVAS AL VOLVER, TRAS TU CARRERA UNIVERSITARIA, A CHILECITO?

Siempre tuve en claro que después de mi formación volvería a Chilecito, en ningún momento tuve la idea de quedarme a vivir en Córdoba. O en buscar otro horizonte, mi motivación más grande fue ver todo el potencial que teníamos acá, y lo que podíamos hacer. Existía una capacidad de gestión y trabajo tan contagiosa, que yo lo vivencié por completo, verlo a mi padre, sin duda fue una inspiración, junto a Roberto Mantovani y Lorenzo Capecce eran un trío imbatible, tenían una potencia en conjunto que transmitían fuerza, convicción y trabajo. Me abrieron las puertas de un mundo con tal naturalidad y generosidad sin límites. No solo para mí, sino para todos los jóvenes que quisieron tomar la iniciativa de construir y aprender en esos años. Incluso hasta el día de hoy CARPA sigue manteniendo esa conducta de apertura con los jóvenes, y con todo aquel que desee acercarse, formar parte de la cámara.

ES UN FARO REFERENCIAL MARIO GONZÁLEZ, TU PADRE, EN ESTE MOMENTO DONDE TÚ DESEMPEÑO COMO PRESIDENTE ANTE DOS LUGARES DE IMPORTANCIA COMO LO ES CARPA Y COVIAR. ¿QUÉ ROL TIENE EN TU VIDA FUERA DEL VÍNCULO FAMILIAR?

Constantemente estamos en dialogo, me apoyo mucho en él, es mi consejero por excelencia. Siempre actúa desde un lugar de respeto absoluto, aunque no coincidamos en algún punto, esa es una actitud muy noble de su parte. Mi tío Ambrosio también fue siempre un ejemplo en todos los aspectos que se pueda destacar. Sin embargo debo decir que Roberto Mantovani fue un gran respaldo y guía para mí, tuve el privilegio de estar con grandes referentes, como también fue y es Lorenzo Capecce. Con él comencé desde muy joven incluso, trabajando y compartiendo experiencias, no obstante siempre hago la salvedad y aclaro, que todos tuvimos las mismas oportunidades de formar y participar en cercanía con estos líderes. No todos tomaron a favor esas posibilidades, la educación paralela de recibir estos aprendizajes de personas con conocimientos, acción y trabajo en el ámbito donde me desarrollé, siempre fue igual para todos. Lo más interesante es que en este contexto, nunca hubo exigencias o caminos pautados para seguir formas. Este respeto de parte de ellos siempre generó la posibilidad de crecimiento, ya que no hay imposiciones.

¿CÓMO LLEGA MARIO A LA PRESIDENCIA DE LA COVIAR?

Esta entidad es la más importante de la actividad Vitivinícola Argentina, CARPA desde sus inicios formó parte del directorio de la misma. Tres entidades del sector privado lo conforman, además de las que pertenecen al Estado. Con lo cual el sector privado, público y gubernamental se encuentran nucleados. Hace tres años atrás estuvimos en la puja por esa presidencia, donde terminaba su gestión un representante de San Juan. La Rioja perdió la votación en aquel entonces, asume José Zuccardi, y transita sus tres años de gestión. Finalmente en esa ocasión, cuando no estábamos buscando el lugar, por unanimidad nos piden los directores ejercer la presidencia de COVIAR. Haciendo un balance hoy, considero que fue positivo no haber tenido la presidencia tres años atrás. Habrían estado más dividido todos los criterios, si bien este es el peor año de la vitivinicultura argentina, comencé con la helada tardía, con caídas en el mercado interno y externo. Con lo cual no hay una pata de la vitivinicultura que se encuentre funcionando correctamente. COVIAR desarrolla una estrategia a largo plazo, esto hace fuerte a la entidad. Siempre hay diferencias, egos, ese es mi trabajo más fuerte en este momento, donde estamos de acuerdo y hay consenso avanzamos todos. Cuando hay muchos conflictos, dejamos a un lado la situación para no perder tiempo. Hemos logrado de a poco tener una participación todos en la mesa de trabajo.

¿CUÁL ES TU MEJOR HERRAMIENTA A LA HORA DE LIDIAR EN ESTOS ESPACIOS DE REPRESENTACIÓN?

Considero que mis posibilidades son distintas, no tengo compromisos fuertes con nadie, en lo personal me refiero, el hecho de poder llevar adelante diferentes diálogos en estratos sociales diversos. No haber estado afectado con situaciones laborales, ideológicas y participaciones políticas, marca las posibilidades de tener neutralidad en este desempeño. Creo en el respeto hacia las instituciones públicas, al Gobierno que se encuentre dirigiendo el país, pero también creo en las instituciones intermedias como la nuestra. Debe haber siempre un parámetro de respeto en estos lugares y lamento cuando esto no está presente.

FICHA PERSONAL

Mario González fue generando un crecimiento fuerte profesionalmente, buscando el desarrollo sostenido del sector productivo que le toca representar en la sociedad Chileciteña. Heredero y discípulo de legendarios hombres que supieron trasmitir e influenciar con valores éticos, responsables y de trabajo. Es parte de una nueva generación que supo darle valor a esos fundamentos, y se dirige seguro hacia nuevos horizontes.

Perfil profesional: Estudió Ingeniería Agrónoma, en la Universidad Nacional de Córdoba. Comenzó su actividad en CARPA en el año 2006. A partir del 2016 se desempeña como Presidente. En el 2011 fue presidente de la mesa de Presidentes del INTA. Desde el 2016 integra COVIAR, y a partir de marzo de 2023 se desempeña como Presidente de COVIAR. Es además propietario de su empresa de riego desde el 2007. Productor agropecuario.

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