La muerte del Papa Francisco da inicio a un proceso de varias semanas para permitir que los fieles presenten sus últimos respetos, primero para los funcionarios del Vaticano en la capilla de Santa Marta y luego en San Pedro para el público en general, seguido de un funeral y un cónclave -reunión de cardenales- para elegir un nuevo papa.
Y con estos movimientos también resurgen las viejas profecías que vaticinan el fin de las dinastías Papales, y otras más apocalípticas que aseguran que sólo quedaría un Pontífice y luego sobrevendría el fin del mundo, aunque, para los menos drásticos, no se trataría del fin de los tiempos sino de un cambio radical en la estructura de la Iglesia Católica.
Uno de los más conocidos videntes sobre los Papas fue San Malaquías, un monje irlandés del siglo XII, quien vaticinó una línea de reinos Papales desde el sucesor de Inocencio II hasta el último de la lista, identificado como "Pedro el Romano II", que vendría con el fin de los tiempos.
Escribió una serie de predicciones en las que nombraba 111 lemas que corresponderían a los 111 Pontífices que representarían a la Iglesia Católica de Roma desde el año 1.143, hasta la actualidad. Después dejó un renglón en blanco y anotó, sin numerar, al 112, al que denominó Petrus Romanus II (Pedro el romano II), y que –según él- sería el último pontífice.
El Papa número 111 de la lista, a quien San Malaquías designó con la divisa "DE GLORIA OLIVAE" (de la gloria del olivo) correspondía a Benedicto XVI. Pero éste fue el primer pontífice en renunciar en 600 años, tras lo cual fue elegido Francisco. Los exégetas del monje vidente sostienen que el renglón en blanco corresponde al Papa argentino, que llegó al trono de Pedro mientras Benedicto estaba vivo.
Entonces -según las profecías- quien suceda a Francisco será el 112: Petrus Romanus II, o Pedro Segundo. Con esta consigna está profetizada la caída del Vaticano, el fin de la dinastía Papal y la destrucción de la Ciudad Santa, para los más apocalípticos, y un cambio radical en la Iglesia para los estudiosos más realistas.
La descripción que Malaquías hace de este lema es revelador, aunque todavía especialistas discuten sobre su significado. El monje escribió: "Durante la persecución final de la Santa Iglesia de Roma reinará Pedro el Romano II, quien alimentará a su rebaño entre muchas tribulaciones; tras lo cual, la ciudad de las siete colinas (Roma) será destruida y el Juez Terrible juzgará al pueblo. Fin."
El significado de este último lema, se presta a confusión y los exégetas de San Malaquías le dan distintas representaciones que van desde un cataclismo, la tercera guerra mundial hasta la llegada del Anticristo, de la Segunda Venida de Cristo y el Fin del Mundo. Pero los estudiosos más realistas ven una referencia a una renovación espiritual de la Iglesia Católica.
Y aquí es donde la mirada de los especialistas en las profecías se centra en cuatro de los cardenales que conforman el Colegio Cardenalicio que elegirá al próximo Papa en el Cónclave y que podría ser designado para ocupar el trono de San Pedro.
Los candidatos
El nombre que suena con más chances es el de Pietro Parolin, Secretario de Estado del Vaticano, el hombre fuerte de Francisco. Se le considera un sacerdote moderado y pragmático en términos teológicos, lo que lo convierte en un candidato de consenso y con una visión progresista, pero al mismo tiempo con una gestión tradicionalista. Este cardenal tiene 70 años, es italiano, lo que lo hace "romano" en el sentido nacional y su nombre de pila es Pietro (Pedro), lo que lo haría cumplir literalmente la profecía de "Petrus Romanus II".
El otro candidato al trono papal es Matteo Zuppi, tiene 68 años y es el Arzobispo de Bolonia. Es romano de nacimiento, lo que encaja con la profecía. Es jesuita, como Francisco y se lo considera progresista y cercano a las ideas de reforma. Y puede elegir el nombre Pedro II para gobernar.
En tercer lugar aparece el cardenal Luis Antonio Tagle, de 66 años y nacido en Filipinas. Actualmente se desempeña como Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos. Aunque no se ajusta a la profecía de San Malaquías, es el favorito de los sectores progresistas. Se lo considera el "Francisco II" por su humildad y visión social y podría ser un Papa importante en tiempos de crisis para conducir la barca de Pedro.
En la lista de "papables", pero con menos posibilidades se encuentra otro "Pedro", pero no es italiano sino africano. Se trata de Peter Turkson, de 76 años y actual Canciller de la Academia Pontificia de las Ciencias y de la Academia Pontificia de las Ciencias Sociales. Es el único de origen africano y muchos lo han relacionado con la profecía del "Papa negro" por su color de piel, y reavivaría otras predicciones de videntes famosos.
Porque no solo San Malaquías realizó predicciones sobre los Papas. Otros profetas tan famosos como él también tuvieron visiones acerca de los ocupantes del trono de San Pedro. Nostradamus, cuyas profecías lo convirtieron en el más famoso "adivino" de todos los tiempos, escribió en varias de sus cuartetas la suerte de los Papas al acercarse "el fin".
Mientras crecen las teorías, cada vez más numerosas, la realidad nos indica que habrá un cambio importante en la Iglesia Católica y que Pedro Romano II podría ser un pontífice que marque ese golpe de timón en el Vaticano. ¿Será Pietro Parolin el Pedro sobre el que profetiza San Malaquías? ¿Será Matteo Suppi quien adopte ese nombre como Papa? ¿Será Luis Antonio Tagle, de origen asiático? ¿Será Peter Turkson el Papa negro de las profecías? ¿O estamos malinterpretando las señales? El próximo cónclave nos dará la respuesta.
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